Efectivos de la policía bonaerense allanaron este domingo por la noche la casa de Julio César Grassi y la Fundación "Felices los Niños" en el partido de Hurlingham, tras una denuncia de un supuesto desvío de donaciones al penal de Campana, donde el cura cumple una condena por abuso sexual a menores de edad.
La policía bonaerense trabajó anoche en el lugar, según informó la agencia DyN, en virtud de una denuncia realizada ante la Fiscalía número 8 de Morón, derivada de una investigación periodística a cargo del programa Periodismo Para Todos.
De acuerdo a la denuncia del ciclo que conduce Jorge Lanata, las autoridades administrativas de la Fundación "Felices los Niños" notaron primero "faltantes" de mercaderías donadas y luego tenían la seria sospecha de que eran enviadas al Penal de Campana donde se aloja Grassi para negociarla con los presos o los guardas, mientras en la fundación las condiciones son paupérrimas.
De este modo, se sospecha que se le habría permitido a Grassi gozar de supuestas prebendas y prerrogativas que, de comprobarse, significaría un incumplimiento de los deberes de funcionarios públicos y corrupción de parte de autoridades del Servicio Penitenciario.
El cura fue condenado en 2009 a 15 años de prisión por el Tribunal Oral de Morón por abuso sexual agravado de un menor de edad que vivía en la fundación "Felices los Niños", que Grassi dirigía.
El religioso quedó preso recién en septiembre del año pasado, cuando la Suprema Corte bonaerense ratificó la pena de 15 años a prisión, por lo que pocos días después, el Tribunal Oral en lo Criminal 1 de Morón ordenó la detención del cura, quien cumple pena en la cárcel de Campana.
En junio pasado, la Suprema Corte de Justicia bonaerense rechazó un pedido de excarcelación presentado por Grassi al desestimar un "recurso extraordinario de nulidad e inaplicabilidad de ley" contra la sentencia dictada.