Día a día, cientos de personas mueren en Siria e Irak como consecuencia de la violenta campaña del Estado Islámico, la organización extremista islamista liderada por Abu Bakr al-Baghdadi y compuesta principalmente por musulmanes sunitas.
Impactado al ver la cara cruel del grupo, un combatiente desertó y compartió su experiencia con BBC Panorama. "La brutalidad del EIIL aterroriza a todos. Mi familia, mis primos y mis hermanos siguen allí. Temo por ellos. Si no me alcanzan a mí, alcanzarán a mi familia", aseguró.
El hombre, que se mantuvo en el anonimato por miedo a las represalias, se reunió con el grupo de periodistas en la frontera entre Siria y Turquía, ya que en el primero los reporteros extranjeros son detenidos bajo la sospecha de ser espías, mientras que el segundo recibe a refugiados y le ha negado el acceso al EIIL.
El desertor se había unido originalmente al Ejército Sirio Libre, pero pronto se trasladó al EIIL junto con toda su tribu. Sus primeras órdenes fueron concurrir a un curso sobre la Sharia, es decir, la ley islámica. "No enseñan los principios del islam, sino el islam que ellos quieren. Apela al corazón y no a la mente", declaró. También describió que posteriormente recibió entrenamiento militar inspirado en las tácticas usadas por la guerrilla iraquí contra Estados Unidos.
"Al principio, el EIIL fue bondadoso con la población para atraer gente, pero una vez que lo logró, cambió dramáticamente, pasando de ser bueno a cruel y duro. O estás conmigo, o estás contra mí. No hay nada en el medio", detalló.
"Toda persona que siga lo que ellos rechazan es un apóstata y debe ser asesinado"
Como evidencia de su extremismo, el EIIL impone sus propias reglas, que van desde la apariencia (barba para los hombres y velo completo para las mujeres) hasta su postura con respecto a la Sharia, demostrada en la destrucción de templos y mezquitas, además de la tumba del profeta Jonás –los sunitas consideran que la veneración de objetos constituye apostasía–. "Cualquier cosa que contradiga sus creencias está prohibida. Toda persona que siga lo que ellos rechazan es un apóstata y debe ser asesinado", explicó el desertor.
Además, aseguró que el EIIL les lava el cerebro e adoctrina a extranjeros jóvenes para que controlen las áreas capturadas. Uno de los casos que más repercusión tuvo es el de Bastián Alexis Vásquez Núñez, un chileno de 24 años también conocido como Abu Safiyya, que en un video expuso los ideales del grupo e hizo explotar una estación de policía, aparentemente, con varios prisioneros dentro.
El objetivo principal del EIIL, que cree en una interpretación literal del Corán, es conquistar Siria e Irak y convertirlos en la base de un Estado islámico para luego expandir este último al resto del mundo. Por este motivo, ha declarado los territorios capturados como parte de un nuevo califato y Abu Bark al-Baghdadi se ha proclamado a sí mismo como califa y ha demanda que todo musulmán a lo largo del mundo le jure lealtad.