Seguramente habrá algunos que piensan que Bill Gates es alguien ya pasado de moda, pero lo cierto es que con su accionar el fundador de Microsoft suele tirar por la borda ese tipo de suposiciones. Y esta vez lo hizo a través de la fundación que preside junto a su mujer Melinda, asumiendo un nuevo desafío dentro de su investigación científica.
Si en algún momento fue la creación de mejores condones o de los inodoros del futuro, ahora la organización se encuentra desarrollando un nuevo proyecto para crear un método de anticonceptivos que se pueda controlar en forma remota, además de durar hasta 16 años.
Esta iniciativa estaría basada en los nuevos MicroCHIPS, desarrollados por la prestigiosa institución estadounidense MIT, de tan sólo un centímetro y medio de tamaño, fabricados en los materiales titanio y platinio, y que podría ser implantado fácilmente con un procedimiento de no más de 30 minutos con anestesia local.
Con este equipo encargado de liberar levonorgestrel, el mismo anticonceptivo presente en pastillas, las mujeres podrían decidir a distancia y por medio de un control remoto si quieren permanecer fértiles o no en un momento determinado.
Hasta el momento, uno de los puntos más cuestionado sobre este método es la posibilidad de que terceros puedan llegar a controlar estos implantes. Sin embargo, la fundación ya se encuentra trabajando especialmente en la seguridad de estos chips, según publica el periódico El Mercurio.
Esta misma tecnología fue implementada originalmente en un estudio aún en desarrollo para pacientes con osteoporosis, que busca remplazar su complejo tratamiento de varias inyecciones con este sistema automático, y que permite al igual que los anticonceptivos, que el medicamento sea entregado por control remoto.
Se espera que el implante pueda empezar a comercializarse en
una vez que reciba la aprobación de la Agencia de Alimentos y
(FDA) en los Estados Unidos.