Es el momento de disfrutar. Era "el" partido. Era éste compromiso. No había otro. Era seguir con el "karma" de ser eliminados en Cuartos de Final o continuar con el sueño de volver a levantar la Copa. Y que, encima, sería en la casa del vecino más 'odiado', que espera el traspié argentino para disfrutar.
En este contexto, el equipo apareció. Y jugó su mejor partido en Brasil. Con un muy buen primer tiempo y un complemento sin sobresaltos, derrotó a Bélgica por 1-0, gracias al gol convertido por Gonzalo Higuaín en el primer tiempo. Así, el "Pipita", que luego fue elegido el 'MVP' del partido (la figura), hizo su primer tanto en el Mundial.
En la previa se confirmó los cambios de Sabella, quien decidió sacar a los dos jugadores más 'flojos' en la primera parte del Mundial (Fernández y Gago) y los reemplazó por Demichelis y Biglia. Justamente estos dos jugadores fueron las figuras del partido (junto a Higuaín). ¡Enorme acierto del entrenador!
¿Fue justa la victoria? Si, totalmente. Argentina jugó el mejor partido del Mundial ante un adversario que llegaba como uno de los mejores conjuntos europeos del último tiempo. Sin embargo, la Selección fue la 'dueña' del partido, generando situaciones de gol, recuperando en el mediocampo y con mucha solidez en la defensa.
Lo mejor de Argentina en ofensiva se dio en el primer tiempo. Estuvo rápido por las bandas, mostrando a Lavezzi como mediocampista por izquierda y a Di María por derecha. El "Pocho" tuvo retroceso y despliegue, aunque también desniveló en ataque. A ellos, obviamente, se le sumaron Messi e Higuaín.
El rosarino tuvo un excelente primer período. Hizo todo. Y todo bien. Comandó todos los ataques. Estuvo rápido. Desequilibrante. Manejó bien los tiempos del partido. ¿Y "Pipita"? Hizo el gol; aunque no sólo se destacó por esto, sino que también estuvo movedizo, participativo e inquietante. Sin dudas, lo que se esperaba del delantero del Napoli.
Igualmente, para que esto se lleve a cabo, fue fundamental lo que brindó el equipo en el aspecto defensivo. Y para esto fue fundamental el trabajo de todo el bloque. Zabaleta estuvo prolijo, mientras que Garay fue una 'muralla'. Además, los que ingresaron rindieron muy bien. Basanta estuvo ordenado y muy duro en el mano a mano. Mientras que Demichelis fue una de las figuras: firme de arriba y de abajo, con la voz de mando que se necesita (algo que no tiene Fernández) e 'impasable' tanto para Origi como Lukaku, que tienen una gran velocidad y potencia.
Además, el mediocampo recuperó. Algo tan sencillo como eso, pero que estaba padeciendo el equipo argentino. Biglia le dio el despliegue y el quite que no tuvo Gago. El ex Independiente fue uno de los mejores jugadores del partido, dándole libertades a Mascherano, quien también jugó un gran partido.
Ya en el complemento, y luego de padecer la salida de Di María por lesión en el primer tiempo (lo reemplazó Enzo Pérez), el equipo se paró algunos metros más atrás, entregándole la pelota y el terreno a Bélgica. Igualmente, las chances más claras fueron para Argentina, que tuvo tres situaciones claras de gol: la de Higuaín en el travesaño, un centro pasado de Zabaleta y la última de Messi. En cambio, Bélgica, más allá de tener la pelota, no inquietó nunca a Romero.
Y en esto último, mucho tuvo que ver el dispositivo táctico (más allá del excelente nivel de muchos jugadores). El equipo fue un 'bloque', se mostró compacto en todas su líneas, sin darle espacios a un equipo que, con esos espacios, es peligroso. Hubo un enorme planteo táctico de Sabella. ¡Perfecto! Así fueron los 90 minutos. Es decir, se potenció lo mejor de sí y se 'minimizó' las virtudes del adversario.
Más allá del 1-0 final, el resultado fue exiguo, considerando los merecimientos de ambos. Argentina hizo todo para quedarse con el triunfo, superando a Bélgica en todos los conceptos del partido. Sin dudas, el combinado nacional jugó su mejor partido en el Mundial. Y lo hizo ante un rival que era como para tener cuidado. Sin embargo, los belgas no aparecieron. Esto, sin dudas, fue mérito de Argentina.
Así, con una enorme actuación colectiva, Argentina vuelve a estar en una Semifinal luego de 24 años. Y se consiguió en terreno 'ajeno'. Ahora, a seguir en el camino de ese sueño: el miércoles, desde las 17 y en San Pablo, Argentina buscará la final cuando mida fuerzas con Holanda.
¡Jugando como ante Bélgica, no hay dudas que hay sustento para pensar que el 13 de julio, en el Maracaná, la Copa puede 'teñirse' de celeste y blanco!
FORMACIONES:
Argentina: Sergio Romero; Pablo Zabaleta, Martín Demichelis, Ezequiel Garay, José María Basanta; Ezequiel Lavezzi, Lucas Biglia, Javier Mascherano, Ángel Di María; Lionel Messi y Gonzalo Higuaín. DT: Alejandro Sabella.
Bélgica: Thibaut Courtois; Toby Alderweireld, Daniel van Buyten, Vincent Kompany, Jan Vertonghen; Axel Witsel, Kevin De Bruyne, Marouane Fellaini, Kevin Mirallas; Eden Hazard y Divock Origi. DT: Marc Wilmots.
Estadio: Mané Garrincha (Brasilia)
Árbitro: Nicola Rizzoli (Italia)