Paraguay se encuentra en estado crítico luego de que un temporal con fuertes vientos y granizo azotara este miércoles Asunción y otros puntos del país. El presidente del Consejo de Gobernadores, Luis Gneiting (Itapúa), aseguró que hay más de 200.000 damnificados por las crecidas del río Paraguay en nueve de los 17 departamentos. De ellos, 60.000 se registraron sólo en la capital, aunque el departamento de Ñeembucú -cerca de la frontera con la Argentina- es el más dañado.
En Asunción, una mujer murió aplastada al derrumbarse el techo de su casa, mientras que cuatro personas resultaron heridas en otros incidentes relacionados con las inundaciones, según informó el ministro de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN), Joaquín Roa. "El nivel de destrucción de la tormenta se asemeja a las consecuencias de un tornado", añadió, y precisó que unas 500 casas quedaron sin electricidad.
La lluvia, que se precipitó la noche del martes y el miércoles en la mañana, empeoró la situación de familias afectadas por la extraordinaria crecida del río Paraguay, causada también por las intensas lluvias en el sur de Brasil. Mezclados entre cloacas y el barro, los damnificados convivían el miércoles entre olores fétidos y el agua estancada en los barrios bajos de la capital, según un reporte de la agencia AFP.
El río Paraguay, que delimita la frontera entre ese país y Argentina, alcanzó este miércoles los 6,85 metros a su paso por Asunción, aumentando cinco centímetros en comparación con el día anterior, según remarcó a la agencia EFE el jefe de Operaciones de la SEN, Aldo Zaldivar. De acuerdo con el periódico local Última Hora, el río podría crecer hasta 40 centímetros más. "Va a seguir creciendo y más con estas lluvias", indicó el gerente de Navegación e Hidrografía de la Administración Nacional de Navegación y Puertos (ANNP).
El crecimiento del río en las últimas dos semanas afectó a miles de inmigrantes rurales que vivían hacía décadas en precarios asentamientos en la capital, a escasos metros del agua. Los evacuados en Asunción están en campamentos dentro de cuarteles, han montado refugios con tablas y mantas en las calles y plazas, o se han alojado con familiares. Uno de los asentamientos más conocidos, la Chacarita, quedó anegado en gran parte y los vecinos han construido casas temporales a escasos metros del edificio del Congreso.
Por las inundaciones, además, unos 3.000 niños permanecen desplazados de sus hogares y sin asistir a la escuela desde hace dos semanas. "Están expuestos en la calle, con adultos que no son de su familia, al tránsito, y problemáticas muy fuertes con el tema del agua y el saneamiento", denunció la ONG dedicada a la protección de la infancia Plan Internacional.
Según la SEN, el gobierno de Horacio Cartes ha invertido unos 2,8 millones de dólares en prestar asistencia humanitaria a los afectados. Las embajadas de China, Estados Unidos, Japón y la Unión Europea, así como las ONG Oxfam y Plan Internacional, realizaron diversas donaciones y están prestando recursos humanos y técnicos al gobierno paraguayo.