Murió estudiante herido hace un mes y suben a 43 las víctimas de la represión en Venezuela

Josue Farías había recibido un disparo de bala cuando se encontraba cerca de una protesta de la que no participaba en Maracaibo el 29 de mayo pasado, según informó el director del Foro Penal Venezolano, Alfredo Romero

Guardar

Un estudiante falleció hoy por las heridas sufridas por un disparo a finales de mayo durante una protesta en Maracaibo, oeste de Venezuela, informó la organización no gubernamental Foro Penal Venezolano (FPV), con lo que el saldo de muertos por las protestas opositoras en Venezuela subió a 43. Por el momento, el Ministerio Público aún no ha dado cuenta de la muerte del joven.


"#21J Fallece hace 2 horas en #Maracaibo Josue Farías, estudiante herido de bala en protestas #URBE el 29My", indicó el director del FPV, Alfredo Romero, en la red social Twitter.


De acuerdo con el diario El Universal, Farías era estudiante de Contaduría en una universidad del estado de Zulia y resultó herido por una bala suelta disparada durante un enfrentamiento entre policías, estudiantes y colectivos afines al Gobierno en el que no participaba el pasado 29 de mayo.


El Ministerio Público aún no ha incorporado este caso a sus cifras. En su último relevamiento del 11 de junio, informó de 42 fallecidos y 873 personas lesionadas en el marco de las manifestaciones antigubernamentales que comenzaron en febrero y ya han bajado de intensidad.


Romero indicó en su cuenta que en este momento "hay 115 personas privadas de libertad producto de manifestaciones desde el 4 de febrero".


Las protestas comenzaron a principios de febrero en el oeste del país y se extendieron a toda Venezuela el día 12 de ese mismo mes, cuando dos marchas acabaron con incidentes en Caracas en una jornada que dejó tres muertos y decenas de heridos.


Las protestas se extendieron al resto del país, incorporando demandas relacionadas con la crisis económica y de inmediato se sumaron sectores radicales de la oposición que impulsan, bajo el lema "La salida", la estrategia de ocupar las calles y forzar la renuncia de Maduro, electo en abril de 2013, lo que llevó al presidente a calificar el movimiento de "golpe de Estado en desarrollo".


La violencia generada en las protestas llevó al Gobierno y a la opositora plataforma Mesa de la Unidad a comenzar un diálogo en abril que permanece congelado desde mayo por lo que la oposición considera falta de "gestos" por parte del Ejecutivo.


La Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y el Vaticano han participado en esas conversaciones como terceros de buena fe.

Guardar