La madre de Alan Gross, que cumple una sentencia de 15 años de cárcel en La Habana, murió este miércoles sin ver a su hijo por última vez después que el Gobierno cubano le negó una petición para verla.
"Evelyn Gross, de 92 años, murió el 18 de junio en Plano, Texas tras una larga batalla con cáncer del pulmón, dijo la familia en una declaración que mandó por correo electrónico.
Hace cuatro años se le diagnosticó la enfermedad y su "último deseo era ver a su hijo antes de morir".
"El gobierno cubano se negó a darle a Alan un permiso humanitario para visitar a su madre, a pesar de las repetidas peticiones y la certeza de que ella se estaba muriendo", agregó la declaración.
"Es un golpe devastador para Alan y nuestra familia", dijo Judy Gross, esposa de Gross. "Estoy sumamente preocupada de que ahora Alan renuncie a todas las esperanzas de volver otra vez a casa y haga algo drástico. De seguro debe haber algo que Obama pueda hacer para que sea puesto en libertad de inmediato".
Gross fue arrestado a finales del 2009 y fue hallado culpable en 2011 de amenazar la seguridad nacional de Cuba tras entregar de forma ilegal sofisticados equipos de comunicaciones a la comunidad judía en La Habana para que pasaran por alto los controles del Gobierno a la hora de tener acceso a la Internet.