Thomas Lomok, de 24 años, y Nicanor Yefremov, de 27, se hospedaban en un hotel de Moscú.
Estaban aburridos y, aunque parezca increíble, se les ocurrió que sentarse en la parte externa de la ventana de la habitación, ubicada en un primer piso, sería divertido. Pero la estructura de hierro no aguantó el peso de los dos.
Un video grabado por una cámara de vigilancia registró el momento en el que los jóvenes salieron por la ventana e, instantes después, cayeron 12 metros de espaldas y dieron de lleno contra el piso de un patio interno del complejo.
Ambos quedaron tirados boca abajo, inmóviles. El primero en darse cuenta de lo sucedido fue un tercer amigo, que corrió hasta la ventana y se asomó para ver cómo estaban. Lo mismo hicieron los huéspedes de las habitaciones contiguas.
Entonces empezaron a salir distintas personas de la recepción del hotel, que se acercaron corriendo a los jóvenes para asistirlos. La escena se volvió caótica por la gran cantidad de gente que se agolpó alrededor, mientras ellos seguían sin mover un músculo.
Minutos más tarde llegó una ambulancia, que los trasladó hacia un hospital. Allí les encontraron severas heridas internas.
Pero a pesar de la gravedad del episodio, un vocero de la Policía confirmó que
, y que se espera una recuperación total.