El domingo se realizó la prueba preliminar en el partido que Corinthians y Botafogo disputaron por el Brasileirao –igualaron 1 a 1- pero algunas instalaciones no fueron utilizadas en su totalidad y se permitió el acceso a 40 mil personas y no las 68 mil estipuladas para el primer encuentro oficial.
El Arena Corinthians de San Pablo, donde Brasil y Croacia abrirán el Mundial y donde se realizará la ceremonia inaugural, no está terminado a una semana del Mundial. Y desde la FIFA expresaron que quedan días de mucho trabajo para llegar en condiciones al 12 de junio.
Tras un evento publicitario que se realizó esta semana, los oficiales de la organización comprobaron que no hay un sector en el que no haya al menos un obrero realizando ajustes en las estructuras, tanto en la parte interna como en la externa.
Las tribunas provisorias, ubicada en las cabeceras, que se utilizarán durante el Mundial no están terminadas y todavía hay grúas instaladas afuera del Arena Corinthians, donde además de Brasil-Croacia recibirá otros cinco partidos del Mundial 2014.
Otras de las partes que faltan completar son el sector de prensa. En las gradas, para 2.000 periodistas, todavía falta la colocación de televisores, las cabinas de transmisión aún no fueron finalizadas ni tampoco la instalación de los cables de Internet.
En el interior del estadio, fueron utilizadas dos pantallas de televisión gigantes por las que los aficionados siguieron el duelo entre Corinthians y Botafogo. El proyecto original establecía cuatro pantallas pero, según explicaron los organizadores, habrá dos debido a los atrasos.
Los atrasos en las obras, que estaban pautadas para ser terminadas en diciembre, se deben a que los trabajos tuvieron que ser detenidos tras la muerte de un obrero en marzo y a que muchos de los elementos necesarios no llegaron todavía.