En diálogo con De Una, Otro Buen Momento de radio La Red, Cristian Ledesma confirmó un rumor que venía tomando fuerzas con el correr de las horas. En México y con un Superclásico con Boca de por medio, disputará su último partido con la camiseta de River, la que seguramente no utilizará más como profesional, teniendo en cuenta su entrada edad (35 años). Fue contundente: "La ida de Ramón fue lo que me llevó a tomar esta decisión". Se fue el entrenador, se va uno de los símbolos del equipo campeón.
"Es lo mejor, irme de una buena manera, con una buena imagen, es algo lindo. River es el más grande de Argentina, lo tengo claro, se verá el nuevo desafío que haya", explicó el "Lobo", quien escribió otra página dorada con el 35º campeonato en la historia de la institución. Y a la vez, aseguró que no colgará los botines, ya que se siente con fuerza para continuar, aunque aclaró que "jugaría en cualquier equipo del país, menos en Boca". Que Bianchi lo descarte...
Fue algo muy fuerte lo que vivió Ledesma en esta última etapa. Luego de revelar que ya le había manifestado su determinación a algunos compañeros y que lo hará en grupo en breve, se refirió al riojano: "Es el técnico que más me dio en mi carrera, ganamos cosas y es una buena manera de terminar un ciclo para afrontar otro con motivación y ganas".
En tanto, afirmó no tener idea clara de los porqués del alejamiento de Díaz, ya que "vivimos cosas muy lindas, pero de las cosas entre Ramón y los dirigentes no tengo noción". Será difícil concentrarse en el amistoso del sábado ante el "Xeneize", al menos para él: "El plantel viene golpeado, se fue un cuerpo técnico que queríamos mucho y cuesta meterse. El ánimo es raro".
Más allá de que Emiliano Díaz dijera que intentarán convencerlo para que se quede en River, Ledesma está totalmente convencido de lo que pretende para su futuro. "La decisión está tomada, ya está. No sabemos quién va a ser el técnico, pero ya está", respondió cuando le plantearon la posibilidad de que Marcelo Gallardo, próximo a arreglar como DT, le pidiera que permaneciera en Núñez. Sobre el final, se quebró y agradeció todo lo que le dio el club.