La tormenta tropical Amanda se convirtió en el primer huracán de la temporada en el Pacífico y el sábado por la tarde se encontraba a 1.060 kilómetros (660 millas) del puerto mexicano de Manzanillo, en el estado de Colima, al noroeste del país.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos informó que Amanda, de categoría 1, presentaba vientos de 130 kilómetros por hora (80 millas) con ráfagas todavía más fuertes.
A lo largo del sábado la fuerza de Amanda fue creciendo ligeramente pero se prevé que su fuerza se incremente más para este domingo.
El meteoro se mantenía el sábado por la tarde moviéndose en dirección oeste-noroeste a 7 kilómetros por hora (5 millas) y, de momento, no se ha activado ninguna alerta para las costas.
El Servicio Meteorológico Nacional de México ha advertido a la población de probables lluvias fuertes en los estados a lo largo de las costas del Pacífico —Jalisco, Colima, Michoacán y Nayarit— e instó a los ciudadanos a estar pendientes de las recomendaciones que emitan las autoridades de protección civil.
Esta entidad advirtió también de posibles tornados en la zona de México fronteriza con Estados Unidos durante la tarde y la noche del sábado.
En concreto, se ha establecido una zona de vigilancia por lluvias fuertes (de 25 a 50 mm) con potencial de granizo y ante la posible formación de tornados en el norte de los estados de Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas.
El especialista en huracanes Stacy Stewart dijo a la agencia AP que parece que Amanda no supondrá ningún peligro para México, al menos en los próximos cinco días, porque aunque se prevé que aumente su fuerza, todavía está lejos de la costa.
No obstante, se espera que provoque un fuerte oleaje en las costas de Baja California.
México prevé una temporada de ciclones tropicales por encima de la media en las costas del Pacífico debido al probable desarrollo del fenómeno de "El Niño" en el transcurso del verano y el otoño. Se esperan 14 ciclones, cinco de ellos huracanes fuertes.
Sin embargo, las previsiones del Servicio Meteorológico Nacional para el Atlántico están por debajo del promedio histórico y solo se prevé un huracán intenso.