Movistar liberó en 2008 el espacio radioeléctrico que heredó al fusionar Unifón con Movicom y hasta 2012 no hubo certezas sobre cuál sería su destino.
En lugar de llamar a licitación, ese año el Gobierno decidió crear Libre.Ar para alquilar a cooperativas y pymes ese espacio. En medio, la poca inversión de las operadoras y el auge de los teléfonos inteligentes terminó por prácticamente colapsar las redes.
El anuncio de licitación para redes 4G y la liberación del espacio que ocupaba Libre.Ar prometen aliviar a los usuarios de telefonía celular argentinos, que serán los últimos en América Latina en contar con ese tipo de servicio.
La operadora de telefonía móvil Telia Sonera fue la primera en lanzar una red Long Term Evolution (LTE) de forma comercial, en 2009, en Suecia y Noruega. En ese año, se lanzaron tan solo dos redes con esa tecnología; para noviembre de 2013 ya eran 230, distribuidas en 88 países en todo el mundo, según la organización GSMA.
En la actualidad, son 101 los países que cuentan con 4G, muy por encima de los apenas nueve que existían en 2010. Con excepción de África, prácticamente el mundo entero está bajo el paraguas de esa tecnología.
Exceptuando las Guayanas, el 100% de América del Sur tiene al menos una red 4G en funcionamiento.
Uruguay y Brasil fueron pioneros en diciembre de 2011 al ofrecer el servicio en algunas ciudades, algo que se fue extendiendo a medida que más operadoras se sumaban al 4G.
Colombia y Paraguay se sumaron durante 2012. Le siguieron un año después Chile, Ecuador y Venezuela. En 2014 lo hicieron Perú y Bolivia y fueron así los últimos países en anunciar la puesta en marcha de una red 4G en sus territorios.
La Argentina llega entonces en último lugar dentro de América del Sur a pesar de tener más líneas activas que habitantes.
En la región, según la asociación integrada por empresas del sector 4G Americas, Brasil, Chile y Colombia son los países que el próximo año estarán "cerca del nivel ideal para la cobertura de 4G".
Según el director regional de 4G Americas, Bob Calaff, estos tres países cubren sólo entre el 30% y 4% de la cantidad de espectro entregado a las empresas para dar un servicio adecuado.
A fines de este año, según la estimación de la entidad, habrá 6 millones de usuarios de LTE o 4G en América Latina, un número que "se multiplicará hasta los 82 millones en diciembre del año 2018".
Detrás de Brasil, Chile y Colombia, los países más avanzados en la prestación de servicios de cuarta generación figuran Costa Rica, Nicaragua, Perú, Puerto Rico y Uruguay.
En América Latina y el Caribe, en noviembre de 2013 sumaban 25 las redes comerciales 4G que brindan cobertura en distintos sectores.
Brasil es el país en que más operadoras ofrecen este tipo de conectividad: allí, seis empresas operan redes con 4G. En Colombia existen cuatro; en Chile tres; en Paraguay dos; y en Bolivia, Venezuela y Perú, una en cada país.
Los Estados Unidos y Canadá concentran 29 redes comerciales de estas características, impulsadas por la creciente oferta de dispositivos con soporte para esa tecnología.
En esa región, para junio de 2013 ya se registraban 65 millones de conexiones LTE. La región concentra la mayor cantidad de usuarios, con el 55% del mercado mundial.