Una encuesta del Centro de Estudios Económicos (Ceu) de la UIA, realizada entre más de 300 compañías, reveló que los industriales argentinos vislumbran un panorama nada positivo para lo que resta de este 2014. A su vez, cuestionaron los problemas energéticos y se mostraron expectantes por el rumbo del comercio exterior, que está en fuerte deterioro.
La gran mayoría de los consultados considera que la economía decrecerá este año y que ello conllevará a que no se creen nuevos puestos de trabajo al tiempo que también avizoran despidos, especialmente en el sector automotriz que está sufriendo una fuerte merma de la demanda local y también del consumo brasileño.
Las suspensiones son cada vez mayores en terminales y autopartistas y ya en algunas firmas comenzaron las reducciones de personal. El caso más preocupante es el de Peugeot, que suspendió a 1.000 trabajadores. Si bien la UOM ofreció sumarlos en un plan de capacitación, la sospecha es que esos empleados se quedarán sin trabajo en el corto o mediano plazo.
Consultados sobre el nivel de actividad, el grueso de los entrevistados respondió que el PBI del 2014 oscilará entre 0% y -5%, en coincidencia con el pronóstico realizado por los analistas de la UIA, que plantean una caída del 2%, publica el diario El Cronista.