En un fallo por puntos, Floyd Mayweather consiguió mantener la corona welter y estiró su invicto a 46 combates. Pero quizás en un hecho inédito en toda su carrera, uno de los mejores boxeadores de la historia se retiró abucheado del estadio: con una importante presencia argentina, la multitud presente en el MGM Grand Las Vegas rechazó la decisión y silbó al norteamericano.
Tal fue el nivel de los chiflidos que recibió Mayweather que sus palabras en cuanto terminó la pelea no pudieron escucharse por los altoparlantes. Aunque detrás suyo podía verse a su equipo festejar, el boxeador quedó visiblemente afectado por los gritos. Más tarde, ya en los vestuarios, gente de su círculo intentó agredir a Marcos Maidana, quien minutos antes, ante la ovación del público, había asegurado: "La pelea la gané yo".
El ataque contra el "Chino" no pasó a mayores: los integrantes de su equipo técnico consiguieron frenar al agresor y la trifulca no fue más allá de unos cuantos empujones y manotazos.
Maidana todavía tenía en sus oídos la ovación que uno de los grandes templos del boxeo, el MGM Grand Las Vegas, le había dedicado por su pelea. El "olé, olé, olé, Chinoooo, Chinooooo", llenó todo el estado aún más de media hora después de terminado el combate. Con el respaldo del público, el argentino dejó una provocativa interpretación del respaldo que obtuvo: "Floyd nunca peleó con un hombre como yo, nunca le pegó a un hombre".
Mayweather retuvo la corona gracias a la decisión mayoritaria de los jueces. Las tarjetas que entregaron Burt Clements y Dave Moretti fallaron a favor del norteamericano por 117-111 y 116-112 puntos, respectivamente, en tanto que Michael Pernick dio una igualdad en 114.