Al menos una persona murió en el noroeste de Florida (EEUU) a causa de las inundaciones provocadas por las fuertes lluvias caídas en las últimas horas, que han obligado a decretar el estado de emergencia en 26 condados.
Según informaron las autoridades locales, las lluvias inundaron numerosas carreteras en la zona de Panhandle, en el noroeste del estado, y las precipitaciones obligaron en algunas zonas a moverse en canoas por zonas residenciales.
Para las próximas horas se espera que continúen las lluvias en toda la zona noroeste, aunque en los días que siguen la previsión apunta a una disminución de las tormentas.
En el condado de Escambia se produjeron a lo largo del día situaciones de grave peligro, debido a la imposibilidad de que los servicios de emergencia pudieran atender algunas llamadas de personas que se vieron obligadas a subirse a las zonas más altas de sus hogares como áticos y tejados.
Numerosas carreteras en el norte permanecen cortadas e incluso un tramo de la autopista Interestatal 10, en el norte de Pensacola, fueron cerrados.
La situación es muy similar en más de una veintena de condados del estado que han sufrido importantes inundaciones por los fuertes aguaceros registrados desde este lunes y en los que el nivel de los ríos ha subido considerablemente.
El gobernador de Florida, Rick Scott, declaró el estado de emergencia en una medida que busca paliar los efectos de la crecida de las aguas y corrientes en los ríos del Panhandle, como resultado de las fuertes lluvias registradas desde principios de mes.
La medida de emergencia activa los mecanismos para la movilización del personal necesario para asistir en labores de rescate y el despliegue de la Guardia Nacional en las zonas afectadas.