"La parálisis casi absoluta de la actividad se manifiesta de manera contundente al comparar los valores mensuales con el mismo período del 2008. En ese cotejo la caída fue del 46,3% y, con respecto a 2013 disminuyó 24,1%, siendo este último año ya muy complejo para la actividad inmobiliaria", explicó el notario Jorge Mateo, presidente del Colegio de Escribanos de la Provincia de Buenos Aires.
Por otro lado, si la comparación se realiza con febrero de 2014 la variación positiva fue de sólo 7%. "Podría esto interpretarse como auspicioso, pero la estacionalidad propia de esta época del año refuerza la preocupación, ya que el incremento de la actividad entre febrero y marzo siempre ha sido muy superior", indica el Cepba.
Más áun, porque la provincia estuvo atravesando una situación complicada ante el paro del Registro de la Propiedad. "La situación actual tiene un impacto negativo creciente sobre la actividad notarial relacionada con las operaciones inmobiliarias, llegando a la nulidad absoluta en la última parte del pasado mes", se inquietó Mateo.
Dentro de los afectados por la situación, se encuentran los beneficiarios del plan Procrear, por el atraso en las escrituras de terrenos, el otorgamiento de préstamos del Banco Hipotecario y la compra de los materiales necesarios para construir su casa".
El presidente del Colegio de Escribanos de la Provincia de Buenos Aires, concluye: "Las circunstancias planteadas en esta compleja realidad desactivan todo posible indicio de recuperación de un sector que ha sido golpeado por la situación económica nacional".