El hundimiento del ferry surcoreano ya despierta más dudas que certezas

Este domingo, luego de más de tres días de búsqueda, los buzos que participan en el operativo consiguieron entrar al ferry de donde rescataron 26 cuerpos. Con ellos, la cifra de víctimas fatales asciende a 58, mientras cada son más las dudas en torno al hundimiento.

Sin embargo otros 244 viajeros, la mayoría de ellos niños, siguen con paradero desconocido desde la tragedia ocurrida el miércoles pasado en la costa surcoreana. Algo por lo cual la desesperación se apoderó de las familias de las víctimas, después que el sábado las autoridades informasen que las labores de rescate podrían tomar hasta dos meses.

Frente a este panorama, al menos tres son los mayores interrogantes que surgen en torno al hecho:

¿Por qué se hundió el barco?

Los pasajeros rescatados aseguran haber oído un fuerte golpe antes de que la embarcación empezara a inclinarse. Esto podría haber sido causado por la colisión del ferry contra un objeto sumergido, como por ejemplo una roca o un contenedor hundido. Aunque el ruido también podría proceder de una gran carga que estaba a bordo del buque pero se soltó.

Si bien se sabe que la embarcación hizo un pronunciado giro antes de enviar un aviso de emergencia, lo que aún no está claro es si el cambio de trayectoria estaba planeado o fue consecuencia de un factor externo, según explicó el ministro surcoreano de Asuntos Marítimos. Los expertos consideran que esa brusca vuelta fue lo que podría haber desestabilizado el navío.

John Noble, un experto en salvamento, asegura que la velocidad a la que se hundió el "Sewol" -en unas dos horas ya estaba totalmente inclinado hacia un lado- puede dar pistas.

Noble explica que por las imágenes da la sensación de que el barco se inundó rápidamente, lo que puede indicar que se produjo un gran daño en el casco o fugas en puertas que deberían ser herméticas.

La atención también se ha centrado en quién iba al mando en el momento del accidente. Según los investigadores, un poco experimentado tercer oficial estaba al timón del buque, y no está claro si el capitán estaba presente.

¿Hubo una respuesta adecuada?

El ferry envió la señal de emergencia en torno a las 09:00 hora local (las 00:00 horario GMT) del miércoles, y los barcos y helicópteros de rescate llegaron al lugar del accidente poco después.

"La llamada de emergencia se atendió y hubo una respuesta estructurada por parte de las autoridades", asegura Bruce Reid, director de la Organización Marítima Internacional (OMI), que promueve la seguridad marítima. Aunque al mismo tiempo asegura que es demasiado pronto para sacar conclusiones sobre la efectividad de la misión de rescate.

También surgieron dudas sobre las instrucciones que se les dieron a los pasajeros: varios sobrevivientes dijeron que la tripulación les pidió que permanecieran en sus lugares cuando el barco empezó a tener problemas.

Además, sólo una de las dos lanchas salvavidas del barco se puso en funcionamiento, y muchos pasajeros tuvieron que ser rescatados tras lanzarse al mar con sus chalecos salvavidas.

La orden de evacuación sólo se dio 30 minutos después, según Oh Yong-seok, miembro de la tripulación, quien reconoció que puede que ésta no llegase a todos los pasajeros.

Los pasajeros y la tripulación aseguran que la velocidad a la que se inclinó el barco hacía más difícil moverse dentro del barco, y también dificultó el despliegue de las lanchas salvavidas.

¿Qué esperanzas hay de encontrar sobrevivientes?

"El tiempo es el peor enemigo", explica Bruce Reid al advertir que las posibilidades de hallar a sobrevivientes disminuye a cada hora que pasa.

Las corrientes marinas, que han obstaculizado las labores de los buzos, son igualmente peligrosas para los pasajeros que puedan haber sido arrastrados lejos del barco.

"Esas corrientes son bastante rápidas, por lo que el área de rescate será muy amplio", señala el director de OMI según publica BBC Mundo.

Con la experiencia de otros naufragios, los pasajeros han sido rescatados en algunas ocasiones de burbujas de aire. Pero en aguas heladas como las de la costa surcoreana hay

de supervivencia.