Apretones de mano sí, pero fotos para nada. Algunos atletas olímpicos dijeron que les pidieron que no sacaran sus celulares de la bolsa la semana pasada cuando visitaron la Casa Blanca para conocer al presidente Barack Obama.
La solicitud surgió después de que el bateador dominicano de los Medias Rojas de Boston David Ortiz se tomara un autorretrato, o selfie, con el presidente durante la visita de su equipo a la residencia presidencial. La foto fue usada después por Samsung, el fabricante del celular que usó Ortiz, en un anuncio publicitario.
El medallista de bronce en la categoría de esquí acrobático Nick Goepper estaba entre los atletas que visitaron a Obama. Dijo que pensó en tomarse una foto, pero que prefirió no hacerlo.
La selfie del dominicano no fue la única que le trajo dolores de cabeza a Obama. La foto que se tomaron el presidente norteamericano junto a la primera ministra de Dinamarca, Helle Thorning-Schmidt, y su par inglés en los funerales de Nelson mandela, en diciembre pasado, rápidamente ocupó las portadas de los diarios del mundo.
A partir de entonces fueron múltiples las interpretaciones que se trazaron al respecto. Algunos indicaron un supuesto enojo de Michelle Obama por la imagen tomada por los líderes, mientras que otros calificaron el gesto de los mandatarios como "poco diplomático".