La mayor cantidad de evacuados reside en la localidad catamarqueña de Bañado de Ovanta, a donde viajó este domingo a la mañana la gobernadora Lucía Corpacci con parte de su equipo para dirigir el operativo de asistencia y poner en funcionamiento el Comité de Emergencia, que ya opera en el lugar, donde no se habían reportado heridos.
En esa localidad del departamento Santa Rosa –130 kilómetros al este de la capital catamarqueña– en casi dos horas cayeron 200 milímetros de lluvia, acompañada de vientos huracanados que superaron los 80 kilómetros por hora. El efecto combinado de la acumulación de agua, la crecida de quince arroyos y el desborde el río Bañado de Ovanta dejó a la población casi totalmente bajo el agua, confirmó el intendente municipal Elpidio Guaraz.
"Los evacuados son alrededor de 400, pero no tenemos el número exacto todavía porque hay lugares a los cuales no pudimos acceder y la gente permanece en los techos de sus casas", estimó el ministro de Desarrollo Social, Daniel Barros.
Guaraz dijo que la situación es dramática porque en algunas casas cedieron las estructuras, se cayeron árboles y postes del tendido eléctrico que afectaron ese servicio y, consecuentemente, el de agua potable.
El intendente relató a FM Valle Viejo que "antes de la tormenta también llegó a la población un viento huracanado que causó destrozos en todo el pueblo, con caída de árboles, de paredes y de techos de viviendas precarias" por la intensa lluvia. Otras localidades del departamento Santa Rosa también se vieron afectadas, como Pozo del Campo y algunos parajes que quedaron aislados.
"Hay sectores a los cuales no se puede acceder ni siquiera con tractores, pero a través de celulares los vecinos se comunican y permiten tener un panorama bastante completo de la situación", explicó el ministro Daniel Barros.
"De repente escuchamos un fuerte ruido y se vino la crecida del arroyo. Fue cuestión de minutos y comenzó a entrar agua en las casas, se llenaron de barro y piedras", relató Juana Torres, de Sol de mayo, en declaraciones a Nuevo Diario, respecto de lo vivido esta madrugada. "Quedamos en la calle, sin nada".
En Santiago del Estero unas 100 personas fueron evacuadas en Villa La Punta, Lavalle y poblados intermedios ubicados sobre la ruta nacional 157, tras un alud de barro y piedra que azotó esta madrugada los departamentos de Choya –lindante con Catamarca–, donde llovieron 223 milímetros en pocas horas, detalló el operador de turno de Defensa Civil, Víctor Rodríguez.
"Son poblaciones serranas chicas, donde hubo corrimiento de tierra, aludes de barro y anegamientos de ranchitos de personas que no viven allí, pero los usan para criar sus animales", contó. Rodríguez explicó que el servicio de energía eléctrica está cortado en toda la zona, pero las rutas nacionales 157 y 64 permanecen transitables.
Parte de los evacuados fueron trasladados a las escuelas de la localidad de Lavalle, donde funciona el centro operativo de las tareas de asistencia.