La joven, de nombre Stephanie, tiene 14 años y este martes fue detenida por la Policía de la Molina, Lima. "Rociaba con insecticidas y ambientadores para disipar los malos olores por la descomposición del cadáver", declaró el comandante Rafael Morón.
La menor contó a la policía que su novio de 16 años, de nombre Fernando Jesús, cometió el homicidio el 11 de enero con una mancuerna, con la que golpeó la cabeza a la víctima, Vilma Gabriela Niño de Guzmán de la Rosa.
La madre tenía 63 años y, al llegar a su casa, había encontrado a los menores encerrados en una habitación. Guzmán los increpó por su actitud y esto habría provocado una violenta pelea con la pareja.
Según los primeros elementos de la investigación policial, tras el asesinato, la joven Stephanie continuó con sus actividades con total normalidad, recibía a sus amigos en su casa y colocaba fotos en la red social Facebook. Su padre, un octogenario que padece Alzheimer, siguió viviendo en la casa, pero no se dio cuenta del crimen.
El presunto homicida se entregó este martes y negó ser el asesino, según su abogado Juan Madrid, quien sostiene que la joven mató a su madre "con un fierro".
Según las leyes peruanas, los menores que cometen asesinatos no van a la cárcel, sino que se les impone un internamiento en el que están en tratamiento psicológico, por un plazo no mayor de seis años.