Una de las conductoras de la cadena RT en Norteamérica renunció al aire a causa de la línea política que el medio le imponía al informar sobre la invasión a Ucrania.
Liz Wahl, descendiente de refugiados húngaros que tuvieron que abandonar su país a causa de la ocupación soviética en el siglo pasado, vive en Estados Unidos y dijo enfrentar "muchos desafíos morales y éticos" al trabajar para la estación de TV.
"Me siento afortunada de haber crecido en los Estados Unidos. Soy hija de un veterano, mi pareja es médico en una base militar donde día a día siente de primera mano el precio que paga la gente por este país. Y por eso no puedo ser parte de una cadena fundada por el Gobierno de Rusia que encubre las acciones de Putin. Estoy orgullosa de ser norteamericana y creo en difundir la verdad, y es por eso que después de este noticiero, renuncio".
En declaraciones a The Daily Beast, Wahl dijo que el Kremlin ejerce una sutil influencia sobre RT, con repetidas censuras sobre reportes e imposición de la narrativa oficial, y denunció que "si quieres tener éxito allí no debes cuestionarlo".
RT emitió un comunicado reflejado en The New York Times en el que señala que la renuncia de Wahl fue "nada más que un show de autopromoción", y que debió seguir otro camino, dirigiéndose al editor del medio "como cualquier profesional".
Otra conductora norteamericana de RT, Abby Martin, había hecho una declaración similar al señalar que "solo porque yo trabajo aquí, en RT, no significa que no tenga independencia editorial y no puedo explicar lo suficiente que estoy muy en contra de cualquier intervención militar en los asuntos de naciones soberanas. Lo que hizo Rusia está mal".
La cadena trató de utilizar la controversial declaración como prueba de su apertura a opiniones alejadas de la línea editorial que tienen los informes del medio.
"Contra la opinión popular, RT no obliga a sus periodistas a ser sumisos, y ellos son libres de expresar sus opiniones, no solo en privado sino también al aire", señalo RT al sitio Huffington Post.
"Ese fue el caso de Abby y su comentario sobre Ucrania. Respetamos sus puntos de vista, y los de los otros periodistas, presentadores y anfitriones de los programas, y no habrá reprimenda alguna para la señorita Martin", dijeron autoridades de la cadena.