El sitio de Wall Street Journal revela que la cifra que gastó Samsung en su movida publicitaria durante la noche de los Oscar ronda los 20 millones de dólares.
Pero sin dudas el dinero mejor invertido estuvo en proveer a la conductora de una unidad estrella de su línea Galaxy Note 3, el móvil que Ellen DeGeneres le cedió a Bradley Cooper para que tomara la imagen en la que posaron ambos junto a Meryl Streep, Brad Pitt, Kevin Spacey y Jennifer Lawrence, entre otros.
A pesar de la productiva espontaneidad que destiló la cuestión, de fondo hubo una estrategia de mercadeo de notable ejecución. Como parte del acuerdo de sponsoreo que Samsung firmó con ABC, la señal de TV que transmitió el evento, estuvo la introducción en escena del Note 3. WSJ cita a al menos dos fuentes cercanas a la producción que confirman la versión.
El fabricante de móviles surcoreano dotó al equipo de ABC con smartphones para utilizar durante la transmisión con la promesa de que tendrían pantalla a lo largo la entrega de los premios Oscar 2014. Durante la previa, en la alfombra roja, ABC emitió un clip de los seis jóvenes cineastas premiados utilizando equipos de Samsung en los estudios de Disney, grupo al que pertenece la señal.