Suma críticas el anteproyecto de reforma del Código Penal

En el PRO y en el socialismo aparecieron posiciones encontradas entre los legisladores. Massa ratificó su profundo rechazo, Duhalde coincidió, Cobos cuestionó la reforma y la UCR anticipó que podría votar en contra

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 Télam 162
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Cristina Kirchner, junto a la comisión redactora del nuevo Código Penal Télam 162
Cristina Kirchner, junto a la comisión redactora del nuevo Código Penal Télam 162

El socialista Hermes Binner evitó ayer dar una definición sobre el anteproyecto en cuya comisión redactora participó por su partido María Elena Barbagelata, pero dio a entender que provocará un debate en el interior del partido.

"Nos obliga a a debatir los temas concretos y saber dónde están los peligros principales. Este es un tema que seguramente va a exigir debate. Nosotros no estamos a favor de rebajar las penas, sí queremos debatir la gravedad de las penas", explicó el ex gobernador santafecino en declaraciones a Radio 10.

Por el macrismo, el primero en salir a manifestar cuál será la postura que adoptará en el Congreso cuando el proyecto se trate sobre tablas fue el diputado Federico Pinedo, quien sorprendió al cruzar a su par del Frente Renovador Sergio Massa por repudiar el texto elevado al Ejecutivo nacional.

Ocurre que el férreo opositor al kirchnerismo integró la comisión que redactó el anteproyecto de Código Penal para "no dejar que hicieran lo que quisiesen". En diálogo con radio Mitre, el diputado macrista coincidió con el juez de la Corte Suprema Eugenio Zaffaroni al señalar que el Frente Renovador comete numerosas inexactitudes en sus críticas: "Massa dijo por ejemplo que la corrupción era excarcelable, pero tiene un máximo de pena de 12 años, por lo que no es excarcelable".

Pinedo aseguró además que no hay una reducción general de las penas, sino que se "reducen 111 y se aumentan 150". "El valor máximo a defender es la vida, así que el asesinato tiene la pena máxima. Después se hizo una escala para tratar de mostrar una proporcionalidad. Pero puede ser que el Congreso después diga que un delito le preocupa especialmente y acerque su pena a la del homicidio", detalló.

Pero también en el PRO aparecieron posiciones encontradas. "Tengo diferencias con algunos de los contenidos del anteproyecto, inclusive con Pinedo. Estoy para dar el debate, incorporar lo que falta y modificar lo que no me gusta. El disenso es la esencia de la democracia", planteó ayer la diputada Laura Alonso.

El constitucionalista y ex legislador radical Ricardo Gil Lavedra, quien integró la comisión que elaboró el anteproyecto de reforma del Código Penal entregado a la Presidente, pidió "evitar hacer política partidista" con la discusión. Sin embargo, desde la UCR le pusieron paños fríos a la medida y Julio Cobos y otros tres diputados nacionales de Mendoza adelantaron que votarán en contra.

Cobos emitió un comunicado firmado junto a los diputados mendocinos de la UCR Luis Petri, Patricia Giménez yEnrique Vaquie. En la nota, los cuatro opinaron que la reforma consagrará una "ley más benigna" que la anterior. Y advirtieron que "disminuye las escalas penales de los delitos de homicidios, robos, trata de personas y tráfico de estupefacientes" y que los reos "obtendrán rápidamente su libertad gozando de los beneficios de una ley que parece ser hecha a medida". Por todo esto, llamaron a "rechazarla en el caso de que ingrese al Congreso".

Durante una entrevista radial, el titualr de la UCR, Ernesto Sanz, dio un paso y directamente cuestionó el debate. "La discusión sobre el Código Penal es un entretenimiento que sólo favorece a quienes no quieren discutir lo verdaderamente importante en materia de seguridad", aseguró, en clara referencia al gobierno nacional. "Sería bueno que, en vez de entretener con el Código, los responsables de la gestión territorial nacional provincial y municipal, se hagan de una buena vez cargo y ofrezcan soluciones no debates estériles", agregó.

El vicepresidente del bloque de la UCR en la Cámara alta, Miguel Bazze, fue más cauto al reconocer que "es necesario ordenar y sistematizar el conjunto de leyes penales", pero dejó una advertencia: "Los radicales no vamos a aprobar ninguna reforma del código que favorezca la delincuencia o consagre la impunidad", aclaró.

"El radicalismo va a dar garantías al conjunto de la sociedad, actuando y votando en el Congreso con la firme convicción de que cualquier reforma que se impulse debe estar orientada a lograr un mejor funcionamiento de la Justicia y por sobre todas las cosas a garantizar mayores niveles de  seguridad", indicó.

Y si bien no adelantó un voto "no positivo", como Cobos, subrayó que "los antecedentes del Gobierno en esta materia no son precisamente los mejores".

El comunicado de Bazze concluye con una nota con la que el diputado pareció diferenciarse de Sergio Massa –que a las pocas horas de conocido el proyecto salió a menospreciarlo con dureza–, pero dejó en claro que el voto de confianza de la UCR está lejos de ser un hecho. "Desde el radicalismo no vamos a actuar buscando obtener un rédito político a partir de un problema que padece la gente, y tampoco vamos a  acompañar ninguna iniciativa que no tenga como objetivo excluyente recuperar la seguridad de la ciudadanía", subrayó.

En tanto, de quien sí Sergio Massa recibió el apoyo fue del ex presidente Eduardo Duhalde en su rechazo al proyecto de reforma del Código Penal. "No hay que reformar el Código Penal, es un tema que hay que analizarlo con tiempo. Son momentos inconvenientes para hablar de este tema, es un absurdo", consideró el ex mandatario.

Pese a que días atrás pidió que el líder del Frente Renovador sea candidato a gobernador y Scioli postulante a presidente, Duhalde coincidió con las críticas del ahora ex intendente de Tigre: "No me parece serio, el tema central hoy es la inseguridad. Espero que esto no termine siendo un proyecto. Es un poco apresurada esta discusión. Son debates de una Argentina que en su dirigencia no tienen idea".

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