El gasto volvió a crecer más que los recursos tributarios y agravó el rojo fiscal

El informe diario de Ejecución Presupuestaria de la Secretaría de Hacienda, a cargo de Juan Carlos Pezoa, dio cuenta que a fines de febrero la Administración Pública Nacional había computado ingresos por $81.536 millones, de los cuales $1.188 millones correspondieron a rentas de propiedad del Banco Central, la Anses, PAMI y Fondos Fiduciarios. Se incrementaron 35,3% respecto de lo percibido en similar tramo del año anterior y representaron 9,5% de la meta presupuestada para todo el año de 860.412 millones de pesos.

Mientras que las erogaciones ejecutadas ascendieron a $87.098  millones, con un salto de 36,7% en el bimestre respecto de similar tramo de 2012 y 10,1% de ejecución del crédito presupuestado de 859.582 millones de pesos.

No obstante esa brecha negativa entre los recursos efectivamente percibidos por el fisco y las erogaciones ejecutadas, del informe de marras surge que en los primeros dos meses se obtuvo un excedente financiero base caja de 25.453 millones de pesos, porque sólo se pagaron al 28 de febrero 56.083 millones.

En el bimestre los recursos crecieron 35,3% y las erogaciones 36,7 por ciento

De ahí que a través de una simple "ingeniería financiera" de asumir compromisos pero no pagarlos en forma inmediata se puede mostrar un superávit, cuando en realidad hay déficit y se lo cubre con recursos del Banco Central y la Anses, principalmente.

Subejecución del Presupuesto

Además, otra forma de disimular la real magnitud del desborde del gasto público fue que las diferentes jurisdicciones de la Administración Pública hicieron uso y abuso de la técnica de subejecutar el crédito aprobado por el Congreso de la Nación.

Del detalle de distribución del gasto surge que las áreas que se han mostrado más austeras respecto de lo permitido para el bimestre fueron el Poder Judicial 92%, el Poder Legislativo 83%, los ministerios de Industria 79%, de Justicia y Derechos Humanos 77%, de Agricultura 69%, de Turismo 68%, de Seguridad 66% y de Salud 61 por ciento.

Base devengado se anotó un rojo de $5.562 millones y base caja un superávit de $25.453 millones

Por el contrario, mostraron mínimas abstenciones de ejecutar plenamente el límite asignado los ministerios de Desarrollo Social 1%, Trabajo y Seguridad Social 2% y del Interior y Transporte 9 por ciento.

De ese modo, en el bimestre se registró un ahorro transitorio de recursos de poco más de 20.000 millones de pesos en lo referente al ritmo de ejecución de los planes fijados para el ejercicio y de 61.500 millones en comparación con lo efectivamente pagado.

De todas formas,  a la luz del giro de la política económica con posterioridad a la aprobación del Presupuesto, junto al reconocimiento de una tasa de inflación sensiblemente mayor a la pautada, los economistas descuentan que en los próximos meses no sólo esos ahorros serán neutralizados, sino que por el contrario se revertirán si se profundiza el receso de la actividad económica y crecen los pedidos de ajustes de contratos y salarios.

Cabe recordar que la Secretaría de Hacienda aún mantiene en carpeta la ejecución base caja de enero último de los recursos y gastos de la Administración pública, con el agregado de los fondos fiduciarios, PAMI y empresas públicas.