"Se recibió una llamada para invitarnos a esa conferencia de la paz, nosotros por supuesto que estamos a favor de la paz, pero el país no está para comparsas, el país está para establecer una agenda, para asumir un compromiso", aseguró Henrique Capriles.
El jefe opositor criticó al mandatario venezolano por utilizar a los distintos sectores sociales que dependen de los subsidios estatales para mejorar la imagen de su gestión: "¿Qué está haciendo Nicolás? Está tratando de bailar sobre esta situación de conflictividad, ha convertido el Palacio de Miraflores en una sala de fiestas, todas las tardes hay fiesta en cadena de radio y televisión, ayer hubo fiesta, hoy una conferencia de la paz".
Según el gobernador de Miranda, el Gobierno habla de un diálogo, habla de paz, pero se trata de un llamado vacío. "¿Cómo logras la paz, cómo puedes resolver una situación de conflicto? Tienes que tener la voluntad de hacerlo, no se trata de reuniones, no se trata de ir al Palacio de Miraflores y tomar una foto o escuchar un discurso".
En la misma línea se pronunció la Mesa de Unidad Democrática. Su secretario ejecutivo, Ramón Guillermo Aveledo, envió una carta al vicepresidente ejecutivo, Jorge Arreaza, en la que confirma que la alianza de partidos no participará de la Conferencia por la Paz.
"No usaremos el lenguaje insultante y descalificador con el cual usted, los voceros del Gobierno y del partido oficial nos aluden sistemáticamente -incluso simultáneamente a esta invitación-. Pero mi deber es transmitirle, con el respeto que su persona y su responsabilidad merecen, que no nos prestamos para lo que derivará en un simulacro de diálogo que desembocará en una burla a nuestros compatriotas", disparó.
Hay condiciones para el diálogo: una agenda consensuada y un tercero que medie, que podría ser la Iglesia.
Según el antichavista, la situación del país es grave. "Hoy la convivencia está seriamente alterada por hechos conocidos, de los cuales, ustedes y nosotros tenemos lecturas divergentes y que fundamentalmente están en el ámbito de responsabilidad del Gobierno. Pero el cuadro económico y social es todavía más exigente que esta crisis aguda de protestas y represión desmedida con participación en ella de civiles armados convocados por la autoridad".
La coalición dejó muy en claro que hay condiciones para el diálogo: una agenda consensuada y un tercero que medie, que podría ser la Iglesia.
La oposición y los estudiantes venezolanos no cesan sus reclamos contra el gobierno de Nicolás Maduro. Las manifestaciones llevan tres semanas, y la paz aún parece lejana. Este miércoles, fue el turno de las mujeres, quienes fueron convocadas por la diputada María Corina Machado y Lilian Tintori, esposa del detenido líder opositor, Leopoldo López. Según consigna El Nacional, la manifestación comenzó en la Conferencia Episcopal, en Montalbán, y se dirigió hasta el destacamento de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), en El Paraíso. El objetivo fue pedir a los militares el fin de la represión.
Además, hubo otras movilizaciones en todo el país, en ciudades como Maracaibo (noroeste), Valencia (centro), Barquisimeto (noroeste), Barcelona (noreste), Maturín (noreste), Maracay (centro) y San Cristóbal (oeste), entre otras. Desde que comenzó el conflicto, el 4 de febrero, se contabilizaron 16 muertos.