Joaquín "El Chapo" Guzmán, el narcotraficante más buscado del mundo, que fue capturado por la Marina mexicana el pasado sábado, se encontraba cocinando junto a su esposa, la ex Miss Sinaloa Emma Coronel, cuando el cuerpo de la Armada tiró abajo la puerta del condominio donde se escondía en Mazatlán.
Una vez que vecinos y periodistas tuvieron la oportunidad de ingresar en el departamento 401 del edificio llamado "Miramar", se podían observar los restos de comida en la sartén, un indicador de su abrupta partida.
Según consigna Daily Mail, un empleado de limpieza del edificio dijo que la ropa se encontraba esparcida por el piso y la cama. Además, comentó que dentro del departamento también había ciertos electrodomésticos, como microondas, un ventilador de piso y un televisor de pantalla plana en una pequeña mesa.
Fotos publicadas por un periódico local muestran el desorden que había en la casa, con la ropa tirada por todos lados y los humildes muebles que había. También se pueden observar en las imágenes pequeñas porciones de comida y algunas bebidas y un bolso sobre el piso.
El sábado pasado por la mañana, la Marina de México cerró las calles laderas del condominio Miramar, de balcones color blanco, con vista al Pacífico y una pequeña piscina al frente.
La cerradura rota. Por aquí entraron los marines a capturar al capo del Cartel de Sinaloa
La detención se registró cuando el reloj marcaba las 6:40, hora local, minutos antes del amanecer. Un vecino, bajo identidad reservada, manifestó que el departamento donde fue encontrado Guzmán había sido ocupado apenas por dos días.
Al momento de la detención, el "Chapo" portaba un rifle de tipo militar, pero en ningún momento atinó a disparar. Según confirmó un oficial que formó parte del operativo, intentó escapar a través de una red de túneles escondida bajo su bañera.
Días atrás Guzmán se había escapado por un túnel secreto, luego de que tropas mexicanas irrumpieron en su principal refugio, en Culiacán.
Una vez capturado, oficiales relataron que Guzmán se veía un tanto rechoncho, de edad media, vestido con una camisa blanca y jeans negros.
Se presume que durante estos casi 13 años, después de haber escapado de la cárcel en 2001, el narcotraficante más buscado por el FBI pudo haber vivido en varios lugares. Desde Argentina hasta el Triángulo Dorado de México, en la zona norte de los estados de Sinaloa, Durango y Chihuahua.
Guzmán y Emma Coronel estaban cocinando cuando la policía tiró abajo la puerta
El cuerpo oficial confirmó la identidad de la joven que acompañaba al narco más buscado del mundo. Se trataba de Emma Coronel, de 24 años, quien fue Miss Sinaloa y tiene mellizas de dos años con el líder del cártel más poderoso de México. Es su tercera o cuarta esposa y había sido vista por última vez en el país en agosto de 2011.
Los operativos federales comenzaron en Culiacán, capital de la costa pacífica de Sinaloa, donde se cerraron calles, incautaron armas automáticas, drogas y dinero, y se arrestó a una serie de colaboradores directos de Guzmán.
En cada una de las casas allanadas, el ejército mexicano se encontró con las mismas particularidades: puertas de acero reforzadas y un túnel secreto de evacuación debajo de la bañera.
En uno de los domicilios, los oficiales incautaron tres toneladas de drogas, que se presume podrían ser cocaína y metanfetamina.
En la habitación se encontró la cama desecha y la ropa en el piso
De acuerdo con lo relatado por uno de los oficiales que ingresó en el túnel, éste era grande y forrado con paneles de madera y conectaba con otras seis viviendas. Había luz y aire acondicionado. Al final del túnel había una escalera azul adosada a la pared que conducía a una de las casas utilizada como escondite.
Las claves del operativo de la Armada
La Resistencia de Guzmán quedó en jaque la última semana, cuando una serie de miembros de su cártel comenzaron a caer en manos de las autoridades mexicanas.
El primer rastro lo obtuvo la DEA en la zona de Nogales-Arizona, donde capturó a uno de los hijos de Ismael Mayo Zambada, uno de los principales jefes y colaboradores de Guzmán. Detenido Zambada, la agencia de inteligencia NSA de Estados Unidos inspeccionó los celulares del joven y así pudo descubrir cómo era la estructura de seguridad, según consigna el Corriere Della Sera.
Por su parte, la DEA y la guardia de frontera apelaron también al uso de drones, lo que les permitió detectar y monitorear los teléfonos de cuatro sicarios importantes del "Chapo" (el "19", el "30", el "Bimbo" y el "Pitaya").
Un infiltrado de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos alertó sobre una posible cumbre de los narcos en Culiacán entre Ismael Zambada y el "Chapo". A ello se suma una interceptación telefónica con la voz del propio "Chapo".
Ya con la ubicación en su poder, los Marines irrumpieron en la casa, pero sólo encontraron a una ex esposa de Guzmán. Sin embargo, él ya se había fugado por el túnel secreto.
Las fuerzas mexicanas capturan a una persona que dice haber llevado al "Chapo", una mujer y un cómplice a la zona de Mazatlán. Ese dato y la interceptación de una breve llamada de un teléfono satelital terminaron de orientar a las fuerzas a un edificio llamado Miramar en Mazatlán.