El presidente de la Federación de Centros Universitarios de la Universidad Central de Venezuela (UCV), Juan Requesens, solicitó a la Iglesia Católica venezolana que sirva de mediadora entre el Gobierno y el grupo de universitarios.
Según consigna Globovisión, el líder estudiantil pidió a la institución religiosa que nombre a un vocero oficial "para que intervenga", que garantice que no se repriman las protestas. "Que sea garante de que no sigan asesinando al pueblo de Venezuela", sostuvo.
También comentó que "seguirán en la calle de forma pacífica, pidiendo la libertad de los detenidos y expresando su descontento con la calidad de vida en el país". Y exigió que se desarme a todos los grupos armados. "Desmantelen a grupos armados que están dando vuelta en todas las ciudades, asesinando e hiriendo a nuestros compañeros".
"Este movimiento está apegado a la paz y a la Constitución, continuaremos movilizados y haciendo asamblea". Y confirmó que marcharán el sábado por "la paz, la justicia y la democracia" a las 10:00, hora local.
Por su parte, el opositor Henrique Capriles, en una entrevista con CNN en español, también habló de la Iglesia Católica y de su rol como mediador. Recordó que tanto él como Maduro tuvieron encuentros con el papa Francisco. "La Iglesia en este momento puede tener una participación activa. Puede ser un mediador entre el Gobierno y los que no estamos en el gobierno", concluyó.
Este jueves, la tensión se apoderó de Táchira cuando aviones de guerra sobrevolaron las manifestaciones opositoras. Primero, helicópteros estuvieron en la ciudad de San Cristóbal, y desencadenaron el nerviosismo de la población y su salida a la calle. Media hora después, según El Nacional, reportaron vuelos rasantes de aviones militares.
Los habitantes de la zona condenaron la maniobra y lo manifestaron con golpes de cacerolas, ya que las denuncias no pueden ser reportadas fácilmente en redes sociales debido al bloqueo de internet que sufren desde la mañana de este jueves.
Reportes de prensa señalaron numerosas calles cortadas y comercios cerrados en la ciudad que es fronteriza con Colombia y fue cuna de las protestas estudiantiles contra la inseguridad el 4 de febrero y aún se mantienen en todo el país.
Desde hace dos semanas, Caracas, San Cristóbal y Valencia viven manifestaciones de jóvenes que al caer la noche derivan en enfrentamientos entre grupos radicales y la Policía, además de intervenciones de individuos armados que son señalados como simpatizantes del chavismo.