"Es materia interplanetaria que estuvo en el espacio unos 4.600 millones de años, se encontró con la Tierra y se desintegró", resumió Coghlan en medio de la conmoción que generó la noticia.
"Tenemos informes de más de 120 km de radio, así que fue un evento a gran altura. La presión de radiación generó esas vibraciones en el suelo y en los vidrios, como si fuera un microsismo", explicó el titular del CODE.
El especialista desestimó las especulaciones que giraban en torno a la posibilidad de que se tratara del meteorito que estaba anunciado por la NASA para el día de hoy: "No tiene nada que ver, caen unos 100.000 por día, pero la mayoría son muy pequeños para verlos, incluso algunos tienen el tamaño de un grano de arena".
Respecto de este bólido que sacudió a Santa Fe, Coghlan señaló que "cuando ingresa en la atmósfera tiene el tamaño de un puño cerrado, pero entra a una velocidad de 130.000 kilómetros por hora... Si hubiese ocurrido en pleno día y con cielo despejado, hubiéramos observado el relámpago".
Un bólido es un meteoro que presenta la apariencia de una esfera de fuego, que, al tener una masa de más de 10 gramos, causa un gran surco al penetrar en la atmósfera terrestre.
"Esto sucedió a unos 70 kilómetros de altura, es una roca del espacio que se va frenando en la atmósfera; por eso, en un radio tan amplio, de más de 40 kilómetros, fue oído, porque sucedió a gran altura", ahondó el director del CODE.
Desde Protección Civil de Santa Fe, Marcos Escajadillo detalló que se sintió una "fuerte explosión" y de inmediato "se activó una red de alarmas, pero no hubo heridos".
En declaraciones a Infobae, el subjefe de bomberos de Armstrong, Walter Valeri, contó que el hecho se produjo "pasadas las 9:30", cuando se sintió "un gran estruendo, una gran explosión".
El impacto de la "materia interplanetaria" afectó a una zona de unos 300 kilómetros de extensión en el centro y oeste de la provincia de Santa Fe.