La agencia de noticias Reuters asegura que el estadio de Cuiabá quedó dañado tras un incendio que fue negado por el gobierno local. A 115 días de comenzar el Mundial de Brasil 2014, un informe del Ministerio Público alerta que la sede podría no estar lista y critica a los funcionarios del Estado local.
"Fue imposible obtener buena información hasta ahora. Vamos a garantizar que ningún partido se juegue en el Arena Pantanal hasta que la seguridad esté completamente garantizada", afirmó Clóvis de Almeida, del Ministerio Público.
Una denuncia fue entregada a la Secretaría Extraordinaria de la Copa del Mundo 2014 en diciembre pasado y nadie sabe si los daños fueron corregidos. Existe una intención de ocultamiento; y por eso es que compartieron la información a la prensa para que las autoridades locales den respuestas.
"La pérdida de resistencia de algunos elementos puede comprometer la estabilidad global de esta construcción. Se recomienda, fuertemente, que sea verificada por medio de ensayos, para constatar los daños reales que sufrió la estructura", dice una parte del comunicado.
Delia Fischer, portavoz de FIFA, confirmó que "no tenía conocimiento de los daños estructurales provocados por el fuego". Y dejó en claro que se realizarán nuevas inspecciones teniendo en cuenta el informe del ministerio.
Mendes Junior, constructora responsable de la obra, aseguró que "todos los informes de la empresa dicen que no hubo daño estructural". Por lo que los partidos programados en esta ciudad no corren ningún riesgo.
La sede de Cuiabá espera recibir en junio cuatro partidos mundialistas: Chile-Australia (13 de junio), Rusia-Corea del Sur (17/6), Nigeria-Bosnia (21-6) y Japón-Colombia (24/6). Aunque será la FIFA la encargada de tomar la última decisión.