El conflicto en Siria ha causado alrededor de 140 mil muertes en casi tres años de sangrienta guerra civil, según nuevos datos revelados el sábado por el Observatorio Nacional para los derechos Humanos en ese país (ONDUS).
De acuerdo a las mismas estimaciones, entre las víctimas 49.951 son civiles, y de entre ellos, 7.626 son niños y 5.064 son mujeres.
Además, se cuentan 54.199 soldados y componentes de las milicias filo-gubernamentales muertos, 275 del movimiento chiita Hezbolá y otros 360 miembros de otros grupos chiítas extranjeros.
El balance incluye otras 2.837 víctimas no identificadas por la ONG.
Las últimas estimaciones, a finales de 2013, daban un saldo de muertos como consecuencia del conflicto de 130.000. Por su parte, hasta ese momento más de 17.000 personas habían sido detenidas por el gobierno de Al Assad, en tanto los grupos rebeldes había retenido a cerca de 6.000 soldados del régimen o milicias afines.
En enero, el ministro de Administraciones Locales, Omar Ghalawanji, afirmó en una entrevista que los daños causados durante los últimos tres años ascienden a 21.600 millones de dólares.
El conflicto comenzó en marzo del 2011 en el contexto de los levantamientos populares en Medio Oriente conocidos como la Primavera Árabe. Durante casi tres años, se vienen librando combates entre las fuerzas ligadas al gobierno dictatorial de Bashar Al Assad y los grupos rebeldes que buscan derrocarlo.
La crisis abierta llegó a un nuevo pico en las tensiones cuando en agosto del 2013 un equipo de las Naciones Unidas confirmó el uso de armas químicas por parte del gobierno contra objetivos civiles, causando la muerte de más de 1.400 personas.
Actualmente, una misión internacional se ocupa de
. A pesar de que cuenta con el aval del Al Assad,