Sandra Yaquelina Vargas, alias "La Yaqui", tiene 40 años y sus súbditos también la conocen como "Tía Susana". Según una de las tantas investigaciones que publicó el diario El Sol, dirige a un grupo que controla el tráfico de drogas en la zona oeste de Godoy Cruz, en el Gran Mendoza. Sin embargo, las pesquisas policiales no llegaron tan lejos: la mujer no tiene causas en su contra. Para la Justicia y la policía, es una ciudadana común y corriente.
Las investigaciones de El Sol, que comenzaron hace dos años, desnudaron a la organización que dirige Vargas. Y, gracias a su tenacidad, la información llegó a los medios nacionales, lo que enfureció a La Yaqui. "Algo hay que hacer con estos tres periodistas", habría dicho, según fuentes de Inteligencia Criminal.
, fiscal de delitos complejos de Mendoza, dijo hoy: "Es la primera vez en los 24 años que trabajo en Tribunales, en diferentes cargos, escucho sobre un caso como este. Se han solidarizado periodistas de distintos medios. Es un hecho que ha conmocionado a la provincia".
La periodista de Radio Mitre Mendoza, Cinthia Vargas, señaló esta mañana que la presunta líder narco se refugió en la provincia de San Luis a partir de que se dieron a conocer datos sobre su proceder. Y fue desde allí que habría dado la orden de perseguir a los reporteros.
"Los colegas están muy preocupados y hasta el momento no han querido hablar", contó Vargas. "Este dato habría llegado a policías de investigaciones que actuaron rápidamente enviando un comunicado al ministro de Seguridad Leonardo Coperatore, que inmediatamente decidió enviar la custodia".
Los destinatarios de esa orden son los llamados "Angelitos de Yaqui". Tienen entre 15 y 20 años y funcionan como verdaderos soldados al servicio de "la causa": el tráfico de estupefacientes y la lucha contra otros grupos por el control territorial. Su mecánica es la usurpación de casas para convertirlas en kioscos de droga.Mientras que las autoridades les ofrecieron protección a los tres periodistas que finalmente fueron amenazados, la Fiscalía de Delitos Complejos abrió un expediente para investigar el tema.
No es la primera vez que La Yaqui busca venganza. Cuando el 22 de enero pasado ultimaron durante una salida transitoria a su pareja, Cristian Gelvez, de 57 años, quien cumplía una condena a 18 años de prisión por asesinato, la jefa narco ofreció 300 mil pesos en efectivo y un auto a quien encuentre al autor del crimen. Vivo o muerto.
No obstante, El Sol cree que podría ser una maniobra para entorpecer la investigación, ya que en el barrio Campo Papa, donde La Yaqui y su familia pisan fuerte, se comenta que a Gelvez lo mató "un angelito". Y que la orden la habría dado su mujer.
Según contó la periodista mendocina, la propia hija de La Yaqui escribió en su cuenta de Facebook que iba a vengar la muerte de su padre.