Un día después de la evacuación de 83 civiles del casco viejo de la ciudad, sitiada por el ejército desde junio de 2012, cinco explosiones se registraron en la zona este sábado, según el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Horas más tarde, la organización humanitaria Media Luna Roja informó lo ocurrido en su cuenta de Twitter. "Disparos contra los camiones de ayuda y el equipo", escribió sin acusar a nadie, precisando que el conductor había resultado herido y el operativo fue suspendido. "Obuses de mortero caen cerca del equipo y los camiones que se dirigían hacia el casco viejo de la ciudad", agregó.
La evacuación de Homs y la distribución de alimentos y material médico forma parte de un acuerdo entre la ONU, el gobierno sirio y los rebeldes tras meses de negociaciones. Este pacto preveía también un alto el fuego de tres días, a partir del viernes, para poder llevar a cabo estas acciones.
Sin embargo, por el momento, se ignora si se ha logrado empezar a suministrar la ayuda humanitaria.
La Media Luna Roja había anunciado hacia el mediodía del sábado que los camiones que transportaban esta asistencia esperaban únicamente la autorización para poder suministrar el cargamento en el casco viejo de Homs.
Según Naciones Unidas, se trata de una ayuda de emergencia para 2.500 personas, compuesta por víveres, material sanitario e higiénico, colchones y mantas, así como dinero en efectivo y apoyo logístico.
El gobernador de la provincia de Homs, Talal Barazi, indicó a la agencia oficial Sana que "los rebeldes rompieron la tregua esta mañana en el casco antiguo de Homs con disparos de obuses de mortero contra la sede la policía".
Los rebeldes acusaron, por su parte, al régimen de entorpecer la operación de abastecimiento humanitario. "Los barrios asediados y, en especial, las zonas cercanas al lugar de entrada de los convoyes de ayuda, en Hamidiya, fueron atacados por obuses de mortero provenientes de los barrios pro régimen", declaró Yazan, un rebelde del casco viejo.
Homs está dividido por facciones: la mayoría sunita apoya a los rebeldes y los alauitas, la comunidad religiosa del presidente Bashar Al Assad, respaldan al régimen.