Tokyo Electric Power (Tepco) explicó que una nueva medición ha mostrado que el líquido, tomado de un pozo de observación entre los reactores 1 y 2 de la planta el pasado 5 de julio, contenía el nivel récord de 5 millones de becquereles por litro de estroncio-90.
TEPCO originalmente detectó 900.000 becquereles por litro de estroncio y otras sustancias emisoras de radiación beta, antes de comprobar en octubre que los equipos de medición sufrían problemas técnicos que impedían un cálculo preciso.
Ese pozo de observación está a unos 25 metros del muelle de la planta y a unos 6 de un túnel a través del cual circuló agua muy radiactiva tras el estallido de la crisis en marzo de 2011.
El estroncio-90 es un isótopo radiactivo con una vida media de unos 30 años que tiende a acumularse en los huesos y se cree que puede provocar cáncer óseo y leucemia.
La eléctrica ha explicado que volverá a analizar muestras pasadas, ya que muchos de los datos no resultan fiables tras el problema detectado en los aparatos de medición.
El accidente en la planta de Fukushima Daiichi, provocado por el terremoto y tsunami del 11 de marzo de 2011, ha sido el peor desde el de Chernóbil (Ucrania) en 1986.
Sus emisiones han afectado gravemente a la agricultura, ganadería y pesca local y aún mantienen evacuadas a unas 52.000 personas que vivían en torno a la central.