El gobierno ucraniano evalúa la convocatoria a elecciones anticipadas, indicó el representante del presidente Viktor Yanukovich antes de la llegada de la jefa de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Catherine Ashton, prevista para este martes.
El adelantamiento electoral podría ayudar a poner fin a la crisis social y política que atraviesa el país desde hace dos meses, cuando el mandatario decidió no firmar un acuerdo de asociación con la Unión Europea (UE) y privilegiar un acercamiento a Rusia, que le concedió un crédito de 15.000 millones de dólares y una reducción del precio del gas.
Por su parte, la oposición propuso, a través de uno de sus líderes, Vitali Klitschko, una reforma constitucional "urgente" que limite los poderes del Ejecutivo, para terminar con lo que calificaron de "dictadura" del presidente.
En un encuentro que mantuvieron el dirigente opositor y el presidente Yanukovichk, el mandatario respondió a ese pedido argumentando que una reforma constitucional para darle más poder al Parlamento podría llevar "hasta seis meses".
"Eso aumentará la fiebre en la sociedad", amenazó Klitschko al término de la reunión.
El mandatario, por su parte, se refirió a la posibilidad de un adelantamiento electoral durante un encuentro con diputados de su partido la semana pasada, precisó su representante en el Parlamento, Yuri Miroshnichenko.
El conflicto que atraviesa el país está marcado por la rivalidad entre los partidarios de un acercamiento con la UE y los de Rusia, dos fuentes potenciales de ayuda financiera que Ucrania, que se encuentra en la actualidad al borde de la suspensión de pagos, necesita con urgencia.
Miroshnichenko explicó que dentro del Gobierno se evalúan dos posibilidades para salir de la crisis. La primera consistiría en "amnistiar a los manifestantes detenidos y obtener la evacuación de los edificios públicos ocupados por los contestatarios, y la segunda, en convocar elecciones anticipadas".
"Nosotros votamos la ley de amnistía, pero por el momento no se ha aplicado", agregó.
La oposición denunció que esa ley era "inaceptable" porque transformaba a las personas detenidas en "rehenes" al supeditar su liberación a la evacuación previa de los edificios públicos. Por el contrario, se exige la liberación incondicional de los militantes arrestados.
Miroshnichenko afirmó que el Gobierno esperaba poner fin a la crisis gracias a la primera posibilidad, pero que la segunda seguía sobre la mesa.
Se espera, en pocas horas, la llegada anunciada a Kiev de la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, quien hablará con el Gobierno y la oposición sobre la ayuda financiera que la UE y Estados Unidos podrían aportar a Ucrania para ayudarla a salir de la crisis.
Ashton también tiene previsto cenar el martes con los líderes opositores, se supo en la representación de la UE en Kiev. El miércoles será recibida por Yanukovich, antes de entrevistarse con representantes de la sociedad civil y de dar una conferencia de prensa a última hora de la tarde.
"Estados Unidos y la UE están del lado del pueblo de Ucrania en esa lucha"
Diplomáticos occidentales han afirmado que la ayuda de Occidente no podría igualar la propuesta rusa -una promesa de 15.000 millones de dólares en créditos, de los cuales ya se entregaron 3.000 millones y una bajada de 30% del precio del gas-.
Sin embargo, después de la Conferencia de Seguridad de Múnich, que reunió a diplomáticos occidentales con líderes de la oposición ucraniana, el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, respaldó a los manifestantes que creen que su futuro no tiene que recaer en un solo país.
"No hay otro lugar en donde la lucha por un futuro democrático en Europa sea más importante hoy que en Ucrania", dijo Kerry y agregó: "Estados Unidos y la UE están del lado del pueblo de Ucrania en esa lucha".
De acuerdo con diferentes medios internacionales, el
, con motivo de la inauguración de los Juegos Olímpicos de invierno en la ciudad de Sochi.