Rafael Nadal venció a Roger Federer y a dolores generados por su ampolla en la mano izquierda. Con un categorico triunfo por 7-6, 6-3 y 6-3, se impuso ante el suizo en tres sets corridos. El número uno del mundo jugará la final del Abierto de Australia ante Stanislas Wawrinka.
El español tuvo una soberbia actuación en la que cosechó su triunfo número veintitrés en el historial ante el suizo. Contundente en sus golpes, paciente para soportar los embates de Federer e inteligente para jugar puntos largos en los que su rival se vio perjudicado.
Nadal llegó a la final pese a la incomodidad de jugar con una ampolla en la mano izquierda. Apósitos y curaciones fueron las que le permitieron mantener la normalidad en su juego y sobrellevar la semifinal ante uno de los mejores tenistas de todos los tiempos.
"Rafa" jugó el primer set sin protección en su lastimadura pero luego pidió que se le desinfectara la herida y prefirió tapar la zona para obtener mayor comodidad. Pese al dolor, la velocidad de sus remates no varió durante las 2 horas y 24 minutos que duró el partido.
El primer set fue el más peleado de los tres que se jugaron.
La lucha por quedárselo terminó con un tie break que obtuvo el español y que
marcó el principio de un partido duro pero con una superioridad marcada por el
número uno.
Roger no tuvo su mejor jornada. Se quedó corto en la red en reiteradas oportunidades y le costó luchar contra las potentes devoluciones del español. Nadal desgastó al suizo, mejoró su saque y buscó jugarle en los extremos planteando una estrategia que le resultó efectiva para quedarse con los dos últimos sets.
La final del Abierto de Australia se jugará el domingo entre Rafael Nadal y el suizo Stanislas Wawrinka, quién llegó a la última instancia luego de ganarle al checo Tomas Berdych. El español tendrá la posibilidad de convertirse en el tercer jugador de la historia en obtener dos veces cada uno de los cuatro torneos que forman parte del Grand Slam. Así lo hicieron Roy Emerson y Rod Laver.