El dólar oficial experimentó una segunda jornada con fuerte suba en los mercados mayorista y minorista. Esta vez, el Banco Central no pudo mantenerse al margen de la operatoria mayorista, que alimenta el mercado oficial, y debió sacrificar u$s100 millones de sus reservas internacionales para contener el alza de la divvisa, que llegó a negociarse con un máximo de $8,60 en algunas entidades.
Después de la intervención oficial, el valor de pizarra de la divisa norteamericana en el Banco Nación fue de $7,79 para la venta y $7,69 para la compra en el segmento minorista, siempre para operaciones autorizadas por la AFIP, según se publica en el sitio web de la entidad. Esto representa un incremento de 9,1% o 65 centavos respecto del cierre anterior. Desde que comenzó el año, la divisa norteamericana se apreció un 19,5 por ciento.
En el segmento
el dólar pegó un salto de
para la venta, después de alcanzar un máximo intradiario de
según informó la agencia
, con una volatilidad que no reconoce antecedentes desde la salida del plan de convertibilidad en 2002.
"Las ventas
oficiales produjeron un retroceso que estabilizó los valores en torno a los 8
pesos por dólar durante gran parte de la rueda, tras lo que algunas ventas
privadas se acoplaron sobre el cierre y presionaron más a la baja el tipo de
cambio", dijo a DyN un operador de cambio del centro porteño. El volumen
negociado ascendió a u$s318 millones en el mercado de contado (spot) y a 90,5
millones en el de futuros.
Con los valores apuntados, en el sector mayorista la divisa estadounidense acumula ahora una suba de alrededor de 18,8% desde principio de año, mientras que en las casas de cambio acumula un avance de 23,8% en lo que va de enero.
En términos reales, es decir si se comparan porcentajes, hay que retrotraerse a la suba de 59 centavos del 22 de marzo de 2002, hace casi doce años, cuando la divisa norteamericana trepó 24% en una sola jornada, desde los $2,38 a los $2,97, mientras la Argentina atravesaba una profunda crisis económica y financiera tras la salida de la convertibilidad.
En términos nominales, desde la devaluación del austral en 1990, durante el fuerte proceso inflacionario que afrontó el entonces presidente Carlos Menem, con Erman González en el Ministerio de Economía, no se observaba un incremento diario del dólar oficial de esta magnitud, con una coyuntura macroeconómica mucho más débil que la actual, que recién encontró contención luego de la puesta en vigencia de la Ley de Convertibilidad el 1° de abril de 1991, que fijó una tasa de cambio de un dólar por peso argentino o 10.000 australes.
El jefe de Gabinete,
, aseguró esta mañana en una conferencia de prensa que la suba del dólar "no es una
inducida por el Estado". En este sentido, afirmó que la decisión del Banco Central de no intervenir
del tipo de cambio, y que la suba es un resultado de la libre dinámica entre la oferta y la demanda.
"El impacto que genera la devaluación es una
de los productos y los insumos importados. Algunos productos ajustaran mas rápido los precios. Deberíamos ver en los próximos meses más aumentos de precios", explicó el economista
, de la consultora Analytica.
Récord para el dólar libre
Pero el dólar libre también siguió rompiendo récords: subió 95 centavos y se vendió al cierre a $13,10 en la City, con una fuerte alza que se advirtió desde el comienzo de la jornada. Según operadores consultados por Infobae, la volatilidad de la cotización en el mercado oficial hizo que muchas "cuevas" no quisieran desprenderse de los dólares a un precio muy bajo. "Los mayoristas no nos están vendiendo", confiaron a este medio.
"El mercado está tomador. No hay vendedores y hasta tanto no se estabilice el valor del mayorista no vamos a tener una punta certera", dijo a Reuters un operador bajo condición de anonimato.
La brecha entre el oficial y el "blue" se redujo al 68,1%
Este cambio brusco en la política cambiaria del BCRA sorprendió al mercado, e incluso las mesas de dinero de los principales bancos estuvieron sorprendidas del salto que pegó el dólar oficial en las últimas horas.
", comunicaba el BCRA a las entidades cuando preguntaban sobre la escalada, según anticipó
.
Los bancos se comunican vía un chat interno con la mesa de dinero del BCRA, comandada por Juan Basco. Y la fuerte devaluación generó que los rumores sobre un desdoblamiento cambiario formal volvieran a circular en el mercado.
"Si bien era esperada, es una suba que puede modificar negativamente las expectativas. Es más consistente que un esquema de minidevaluaciones, pero tiene que haber cambios en la política macroeconómica", dijo Maximiliano Castillo Carrillo, ex gerente del BCRA y director de la consultora ACM. Y agregó: "No resuelve la inflación ni la brecha. Si el Tesoro se sigue financiando con el Central, la dificultad permanece".