La Policía italiana detuvo este miércoles a 90 personas e incautó bienes muebles e inmuebles valuados en alrededor de 250 millones de euros (equivalentes a casi 340 millones de dólares) en una amplia operación contra la Camorra, como se denomina a la mafia napolitana, en tres regiones de Italia: Campania, Lacio y Toscana.
Según informaron fuentes policiales, la operación tuvo como objetivo al clan camorrista de los Contini, considerado por los investigadores como uno de los que cuentan con mayor poder y presencia en Nápoles.
Las detenciones y la incautación de bienes fueron consecuencia de la investigación llevada a cabo sobre operaciones de reinversión de ingresos económicos de grupos camorristas en empresas y actividades económicas de Nápoles y otras zonas de Campania, así como en el Lacio y Toscana.
La investigación, según los medios italianos, se centra en las figuras de Eduardo Contini y Patrizio Bosti, los dos "capos" que supuestamente blanqueaban dinero proveniente del narcotráfico y otras actividades ilegales a través de una red de empresas presentes en las tres regiones en las que se llevó a cabo la operación policial.
De hecho, los bienes de mayor valor que la Policía italiana precintó este miércoles fueron locales de negocios como pizzerías y tiendas en Nápoles, Roma y Florencia.
Para la
ésta es la investigación más importante que se ha llevado a cabo sobre las actividades ilegales de los Contini.