A casi cuatro meses de la implementación de la resolución que prohíbe hacer trasbordos en puertos uruguayos de las mercaderías nacionales, los perjuicios comerciales se sienten cada vez más fuertes en las terminales marítimas del vecino país, y los empresarios locales reclaman que el presidente José "Pepe" Mujica llegue a un acuerdo con su par Cristina Kirchner para resolver el tema cuanto antes.
En diálogo con el diario El País de Uruguay, Fernando Correa, gerente general de la empresa que controla la terminal de contenedores Cuenca del Plata, ubicada en la bocana del puerto de Montevideo, dijo que había días que la empresa no tenía actividad, y que la caída de la operatividad se ubicaba en un 40%.
Para Correa, quien apuntó que antes de las restricciones puestas en marcha en noviembre la terminal trabajaba las 24 horas al día todos los días de la semana, la única solución del conflicto -originado, según creen todos, por la decisión de Uruguay de permitir a la pastera UPM aumentar su producción, provocando esta represalia- es buscar un acuerdo con el gobierno argentino.
"No se puede esperar al grupo 5 del Mercosur. El primer objetivo tiene que ser que haya una negociación formal con Argentina rápidamente y no entorpecerla", opinó el gerente, quien reveló que debido a la caída de la actividad, la empresa decidió adelantar las vacaciones de buena parte de su staff durante este mes.
También dando cuenta de este deterioro causado por las restricciones argentinas, Juan Olascoaga, el gerente general de Montecon, otra conocida empresa de contenedores, informó que perdió el 10% de su actividad.
"De esta forma, se pierde el porcentaje de crecimiento que veníamos teniendo cada año", enfatizó.