El suizo Stanislas Wawrinka sorprendió al público del Rod Laver Arena tras vencer al rey del Abierto de Australia. Tras una batalla que finalizó 2-6, 6-4, 6-2, 3-6 y 9-7, eliminó al serbio Novak Djokovic, que llegaba como defensor del título, cuatro veces dueño del torneo y actual tricampeón.
Djokovic y Wawrinka reeditaron el electrizante duelo que pasó a la historia por ser el mejor partido de la edición 2013, cuando "Nole" se impuso por 12-10 en el quinto set. Esta vez, el suizo se tomó revancha y ganó una batalla de cuatro horas.
Djokovic comenzó el partido arrollador y jugó un primer parcial aplastante. En el set inicial, no dio posibilidades de quiebre al rival y fabricó tres a favor. Rompió con el servicio de Wawrinka dos veces para cerrar la manga en 6-2 en sólo 30 minutos.
En la segunda manga, el serbio se mantuvo en el nivel excepcional con el que había comenzado el partido, pero el suizo fue de menos a más y generó tiros vencedores. El punto de inflexión estuvo en el momento del 3-3, donde Wawrinka consiguió su primer quiebre del partido y luego mantuvo el saque (5-3). Djokovic logró ponerse 4-5, pero el suizo ganó con su saque el juego que lo dejó set iguales y cerró el parcial en 6-4.
Wawrinka se afirmó tras un muy buen segundo parcial y, tras quebrar en el inicio del tercero a Djokovic para ponerse 2-1, consolidó la ruptura y estiró a 3-1 la ventaja. El suizo no detuvo su momento de gloria. Repitió la fórmula de quiebre y revalidación de su saque para quedar en un 5-1 abrumador. Tras un descuento rápido de "Nole", "Stan" estableció el 6-2.
El cuarto set fue una batalla de ambos, con un nivel de tiros y devoluciones espectaculares. Tanto el serbio como el suizo cumplieron con su deber de mantener el servicio, y el quiebre llegó sobre el final a favor de "Nole", que se colocó 5-3. El festejo y grito de desahogo fue tan fuerte que le valió una advertencia del umpire. Djokovic reafirmó su momento, negó chances de quiebre a Wawrinka y selló la manga en 6-3.
El último set fue una ola de festejos eufóricos y golpes vertiginosos. En el 5-5 llegó la lluvia para ponerle suspenso al final. Tras un breve stop, Wawrinka se llevó el partido que cortó una racha de 14 derrotas seguidas ante el serbio. "Nole" perdió en Australia tras 25 triunfos consecutivos (desde cuartos de final de 2010 que no caía en Melbourne).
Ahora, Wawrinka tendrá que enfrentar al checo Berdych, quien venció al español Ferrer, por un lugar en la final del primer Grand Slam del año.
Por Rodrigo Duben / rduben@infobae.com.