"Les doy la bienvenida y espero que este encuentro ayude a hacer crecer lo que sembramos juntos", expresó Francisco al momento de recibir a la delegación de 15 personas, encabezada por el director ejecutivo del Congreso Judío Latinoamericano (CJL), Claudio Epelman, y el presidente de la DAIA, Julio Schlosser.
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: a 70 años de que los judíos europeos eran transportados a cámaras de gas, hoy los judíos pudieron almorzar comida kosher con el Papa, lo cual era impensable hace un siglo", aseguró en declaraciones a la prensa Schlosser, tras una reunión que duró al menos dos horas y media.
Luego de una breve reunión formal y el posterior almuerzo, durante el cual compartieron "un diálogo franco que demuestra que a partir de la comprensión y el respeto interconfesionales con todas las partes podemos construir un mundo mejor", coincidieron en destacar que la Argentina es "pionera en materia de diálogo interreligioso" y analizaron la forma de lograr profundizar las relaciones entre ambas religiones.
Tras el intercambio de saludos y un corto diálogo en el cual participaron invitados especiales encabezados por el cardenal Kurt Koch, titular del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, se procedió a la comida, servida en una mesa a cuya cabecera se sentaron el Papa, Schlosser y el rabino Abraham Skorka, rector del Seminario Rabínico Latinoamericano "Marshall T. Meyer", destaca la Agencia Judía de Noticias.
El fraterno y amistoso encuentro incluyó un intercambio de regalos, además de anécdotas y recuerdos de Buenos Aires. Incluso, el almuerzo culminó con un significativo momento: sentados alrededor de la mesa, el Papa y los dirigentes judíos cantaron en hebreo el Salmo 133, que reza: "No hay nada más bello ni más agradable que ver a los hermanos vivir juntos y en armonía".
"Todavía me dura la emoción de un encuentro maravilloso. Compartimos una charla y un almuerzo y hablamos de todos los temas que se plantearon en la mesa", contó en diálogo con Télam el titular de la DAIA. En tanto que Epelman aseguró que "como un gesto inequívoco de hospitalidad, el Papa nos recibió en su residencia por horas, en las que pudimos conversar sobre cómo profundizar las relaciones entre judíos y católicos". El encuentro, consideró, "no tiene precedentes por la simpleza con que fuimos recibidos".
Sin dudas uno de los temas centrales del encuentro fue la próxima visita del Sumo Pontífice a Tierra Santa, que tendrá lugar en mayo. "Francisco calificó esa visita como trascendental y dijo que la vive con gran expectativa", afirmó Epelman. "Nos comentó de la importancia y trascendencia que tiene para ese lugar tan convulsionado del mundo que pueda recorrer todos los lugares santos de las tres religiones monoteístas más importantes para la humanidad, transmitiendo un mensaje de paz", dijo, por su parte, Schlosser.
También asistieron al encuentro el vicepresidente 1º de la DAIA, Waldo Wolff; el titular de FACCMA, Javier Veinberg; el subsecretario de Derechos Humanos del gobierno porteño y presidente del Museo del Holocausto, Claudio Avruj; el tesorero del CJL, Javier Mutal; los rabinos Isaac Sacca y Ariel Stofenmacher; y Marcos Grabivker, vicepresidente de la Asociación Internacional de Juristas Judíos.
Asimismo, concurrieron Marcelo Polakoff , presidente de la Asamblea Rabínica; Raúl Bergman, presidente de Bnei Tikva; Raúl Feler, de Tucumán; Boris Kalnicki, Confraternidad Judeo Cristiana.
Participaron también Ariel Isaak y Ariel Seidler, jóvenes que ocupan cargos en Congreso Judío y que despertaron especial interés del Papa.
Por Sebastián Volterri - svolterri@infobae.com