La guerra, desde hace una semana, entre los rebeldes islamistas y los yihadistas del Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL, brazo armado de Al Qaeda) ha causado la muerte de casi 500 personas en el norte de Siria, afirmó el viernes una ONG.
Rami Abdel Rahman, director del Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH), con sede en el Reino Unido, afirmó que "482 personas murieron debido a los combates: 240 miembros de las brigadas rebeldes, 157 combatientes del EIIL y 85 civiles".
Entre los civiles figuran 42 rehenes ejecutados por el EIIL en su cuartel general de Alepo. Las imágenes mostraron los cadáveres con los ojos vendados y las manos atadas, dispersados sobre la tierra del patio central y los interiores del lugar (fotos relacionadas).
Los rebeldes mataron, por su parte, a 47 combatientes del EIIL en la provincia de Idleb (noroeste), afirmó Abdel Rahman. "Las otras víctimas murieron en los combates. Hay seguramente otras decenas de muertos, pero no ha sido posible documentarlo con precisión", recalcó.
El OSDH pidió que "todos los crímenes cometidos en Siria sean llevados ante la Corte Penal Internacional".
Los combates de los rebeldes contra Al Qaeda causan estragos desde hace una semana en el norte de Siria, sobre todo en las provincias de Alepo, de Idleb y de Raqa.
El viernes, los rebeldes siguieron ganando terreno en las provincias de Alepo y de Idleb, donde no está muy presente el EIIL, que avanza en la región de Raqa, bajo control de los yihadistas desde hace varios meses.
Impulsado por el importante poderío que cobró –y sigue cobrando– por su intervención en Siria, el EIIL ya cruzó a Irak, donde cuenta con el control de las ciudades de Fallujah y Ramadi.
El grupo terrorista justificó sus ataques en respuesta a una supuesta marginalización a la minoría suní por parte del gobierno de Nouri al Maliki.
Si bien las fuerzas armadas lanzaron una ofensiva en la ciudad de Ramadi, el control sigue en manos del eje yihadista. Mientras que una intervención en Fallujah, según explicó el gobierno, todavía no fue posible por la gran presencia de civiles.
Embestida oficial en Homs
Los rebeldes también han debido resistir los ataques del Ejército del dictador Bahar al Assad, que mataron a decenas de combatientes que trataron de romper el sitio levantado por las fuerzas militares en Homs.
La agencia oficial de noticias SANA indicó que las fuerzas militares mataron al menos a 37 rebeldes en la zona Matahen de Homs, pero no informó cuándo sucedió.
El OSDH señaló que 45 combatientes de la oposición murieron en enfrentamientos el miércoles por la noche y jueves por la mañana.