La Autoridad del Canal de Panamá (ACP) y el consorcio a cargo de la ampliación de la vía acuática pusieron este martes sobre la mesa sendas propuestas financieras en un intento por evitar la paralización de las obras dentro de dos semanas, como ha anunciado el contratista por falta de liquidez.
Ambas propuestas, que involucran el aporte de fondos de entre u$s283 y 500 millones, fueron presentadas este martes por las partes en la primera reunión que sostuvieron después de que el Grupo Unidos por el Canal (GUPC) avisó, el pasado 30 de diciembre, que suspenderá las obras el próximo día 20 si la ACP no reconoce 1.600 millones de dólares en sobrecostes que no puede soportar.
Las partes expresaron su disposición a seguir dialogando en busca de una solución al conflicto, sin que ninguna planteara directamente cuándo se volverán a reunir.
La ACP dijo estar dispuesta a adelantar u$s100 millones y otorgar una moratoria de dos meses al pago de otros u$s83 millones que anticipó anteriormente al consorcio, siempre que éste también aportara u$s100 millones, con garantía bancaria, y retirara su intención de suspensión de las obras.
El administrador de la ACP, Jorge Quijano, precisó a los periodistas otras condiciones para otorgar el adelanto, entre ellas que el total de u$s283 millones se utilizara para pagar a subcontratistas y proveedores de materiales a fin de garantizar la continuidad de la obra por los próximos "dos a cuatro meses".
El consorcio tiene que "cumplir otros hitos importantes", como que el Canal "reciba en febrero próximo las cuatro compuertas que ya están listas para embarcar en Italia", y que se vuelva a contratar personal suficiente para avanzar las obras de ampliación, añadió Quijano.
A Panamá llegaron en agosto pasado cuatro de las 16 compuertas de las nuevas esclusas, y el segundo de cuatro de esas gigantescas estructuras se esperaba en noviembre pasado.
Quijano reconoció que el consorcio "busca una solución más a largo plazo" y que quisiera un desembolso incluso igual a lo que falta por pagar del proyecto de construcción del tercer juego de esclusas, pero señaló que ello es imposible porque está fuera de lo estipulado en el contrato.
El GUPC obtuvo en 2009 el contrato por u$s3.118 millones para la construcción de las nuevas esclusas del Canal de Panamá, y la ACP ha dicho que ya ha desembolsado u$s2.831 millones, al menos u$s600 millones en anticipos.
El GUPC, que lidera la española Sacyr, planteó por su parte que la ACP le otorgue un adelanto de u$s400 millones y le amplíe una moratoria por un anticipo anterior hasta el final del período de arbitraje, como una "solución definitiva" al conflicto.
"LA ACP ha puesto encima de la mesa una propuesta de solución parcial del conflicto a corto plazo con aportaciones económicas de GUPC y anticipos y moratorias por parte de la ACP. GUPC también ha presentado diferentes alternativas financieras para mejorar la propuesta presentada por ACP y que pueda ser llevada hasta la finalización de la obra", indicó el consorcio en su comunicado.
El consorcio señaló que "entre otras posibilidades que se deben estudiar se encuentra la agilización del proceso" de reclamación.
El GUPC presentó en 2012 una reclamación por 585 millones de dólares a la ACP, que la rechazó, por lo que pasó a una segunda instancia prevista en el contrato, la Junta de Resolución de Conflictos (DAB, por sus siglas en inglés) espera de un dictamen que podría tardar unos dos meses, según ha explicado la Autoridad del Canal.
En diciembre pasado el consorcio presentó a la ACP otro reclamo, por u$s900 millones, que la Autoridad no ha entrado a estudiar porque "falta mucha información", ha dicho Quijano.
El GUPC precisó este martes en su comunicado que la construcción del tercer juego de esclusas, que duplicarán hasta 600 toneladas la capacidad de carga de la vía, "presenta más del 66% de avance".
Quijano, por su parte, se mostró preocupado porque los trabajos de las nuevas esclusas "han bajado significativamente" en por lo menos "un 40%" de noviembre a esta fecha.
El presidente panameño, Ricardo Martinelli, y la ministra española de Fomento, Ana Pastor, que han mediado en el conflicto, consideraron este martes que se ha hecho lo correcto al lograr que las partes se sienten a dialogar y ya queda en sus manos una solución al conflicto dentro de las cláusulas del contrato.
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