Al menos 36 personas, entre ellas 15 niños, murieron en ataques de la aviación siria en tres barrios rebeldes de Alepo, en el norte de Siria, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
"Hoy no son es la nieve lo que cae, sino barriles de explosivos lanzados desde helicópteros y aviones. Ellos mataron a 36 personas, incluyendo a una mujer, 15 niños y un adolescente en seis barrios, incluyendo a los de Haydariye, Ared al Hamra y Sajur", en el noreste de la ciudad, dividida entre el régimen y los rebeldes, afirmó el director de esta ONG, Rami Abdel Rahman.
Varios helicópteros atacaron las regiones rebeldes de la ciudad, otrora importante centro económico, añadió la misma fuente.
Por otra parte, la Media Luna Roja siria repartió alimentos y medicamentos en la prisión central de Alepo, asediada por los rebeldes desde hace ocho meses.
Los voluntarios hicieron salir a 15 presos, indicó el OSDH, que agregó que otro grupo de 341 presos esperaba a ser liberado.
El régimen de Bashar Al Assad había anunciado a principios de la semana una amnistía para los presos debido a las "malas condiciones humanitarias y de salud" en la prisión, según el OSDH.
Entre tanto, al menos 28 civiles pertenecientes a minorías religiosas murieron en Adra, cerca de Damasco, desde el miércoles, cuando los rebeldes islamistas lanzaron una ofensiva con el objetivo de controlar el acceso principal a la capital.
"El número de víctimas civiles aumentó a 28, entre los que hay alauitas, chiitas y drusos", subrayó el OSDH, con sede en Reino Unido y que apoya sus informaciones en una amplia red de activistas y de fuentes médicas.