"A ese costo debe agregarse el perjuicio por los días o semanas que deberán permanecer cerrados muchos locales, hasta tanto puedan reacondicionarlos y reabastecerlos de mercadería", advierten las entidades mercantiles.
Además a esa cifra hay que agregarle el efecto de horas extras caídas por el personal del comercio, en particular en un mes en el que las operaciones se acrecientan por la proximidad del cobro del medio aguinaldo y los regalos de fin de año.
"La mayoría de las pérdidas deberán asumirlas completamente los comercios: el 95% de ellos no tiene seguros contra actos de vandalismo y tumultos, en general por el elevado costo de esas pólizas, por lo cual las compañías no cubrirán esos siniestros", sostiene un comunicado de la CAME.
Frente a esa realidad, diversas entidades financieras diseñaron líneas de créditos especiales para asistir a los damnificados por los actos de vandalismo.