El anuncio fue hecho por el presidente de Amazon, Jeff Bezos, en una entrevista televisiva en vísperas del Cyber Monday, el día de los mayores descuentos del año para los compradores vía internet en los EEUU.
Amazon Prime Air, un servicio que permite entregar paquetes mediante drones, espera la aprobación de la Administración Federal de Aviación de los EEUU (FAA), algo que recién llegaría en 2015.
Bezos dijo al programa 60 Minutes de la cadena CBS que en unos cuatro o cinco años Amazon ofrecerá su servicio Prime Air con aviones no tripulados que entregarán las encomiendas a los compradores en 30 minutos.
El presidente de Amazon, que meses atrás sorprendió a los mercados y al público con la compra del diario The Washington Post, dijo que los drones podrán llevar paquetes de hasta dos kilogramos, que representan el 86% de las entregas que hace Amazon.
"Podría ser en un radio de unos 15 kilómetros desde un centro de despachos", añadió. "Es decir, en áreas urbanas uno podría cubrir porciones muy significativas de la población", explicó.
De inmediato, en Twitter y otras redes sociales se levantó una controversia entre quienes aprecian la promesa futurista y quienes temen que los robots voladores espíen a la ciudadanía, secuestren niños y causen estropicios.
Por su parte, Patrick Fitzgerald, vicepresidente de la empresa de paquetería FedEx, dijo en una entrevista que por ahora no le preocupa el plan de drones repartidores de Amazon.
"FedEx ha sido y sigue siendo pionera en la tecnología", añadió. FedEx cuenta con su propia flota de camiones y de aviones, tripulados todos ellos, que reparte paquetes en todo el mundo.
En gran medida el crecimiento rápido de la distribución de paquetes es resultado del comercio electrónico, que se ha triplicado desde 2005 espoleado por Amazon.
"Los planes de Amazon para usar drones para la entrega de paquetes son sólo un ejemplo del potencial que ofrece esta tecnología a los consumidores, y un reflejo de la innovación de los negocios norteamericanos", dijo a la cadena Fox News el senador Jay Rockefeller, que preside el comité de Comercio, donde tendrá lugar la audiencia.
Esos mismos retos son los que señalan los más escépticos con el plan de Bezos, que recuerdan que la FAA decidió en 2007 que los drones no deberían emplearse para usos comerciales, si bien tiene previsto emitir nuevas regulaciones de seguridad en 2014.
"Tecnológicamente, (la idea de Amazon) es posible. La pregunta es: ¿es segura?", dijo a la revista Político el presidente de la asociación comercial estadounidense para Sistemas Vehiculares No Tripulados, Mike Toscano.
"Hay que pensar en el entorno en el que opera Amazon y otras empresas de mensajería. Hay muchos edificios altos, muchos vehículos, muchos peatones", señaló George Novak, un representante de la Asociación de Industrias Aeronáuticas (AIA).
La posibilidad de que los drones sean pirateados para facilitar el robo de los paquetes o de los propios artefactos es otra variable señalada por muchos analistas.
Y en un país donde muchos ya ven con recelo el impacto que tiene en su privacidad el uso de drones para tareas de seguridad, tampoco han tardado en hacerse oír los defensores de ese derecho.
A Chris Calabrese, asesor legal de la organización Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU), le preocupa sobre todo el impacto que tendrá la idea una vez que otras compañías empiecen a copiarla.
"El efecto será que esta nueva tecnología se hará más barata, más ubicua, y de pronto muchas otras entidades más pequeñas van a subirse al tren", señaló Calabrese.
El senador demócrata Ed Markey anunció que planea presentar un proyecto de ley para que la FAA exija a los operadores de drones ser transparentes sobre el tipo de datos que recolectan, para evitar que recopilen en secreto imágenes de residencias o clientes.
"Antes de que los drones empiecen a entregar paquetes, necesitamos que la FAA entregue protecciones de privacidad al pueblo estadounidense", dijo en un comunicado Markey, cuyo proyecto estará acompañado por uno similar impulsado en la Cámara Baja por el demócrata Pete Welch.
Para hacer volar sus drones, Bezos tendrá además que lograr el beneplácito de los estados, entre los que varios han considerado legislación para limitar el uso de aviones no tripulados.