Los líderes latinoamericanos Nicolás Maduro, Evo Morales y Rafael Correa se definen de izquierda, pero las proclamas religiosas se cuelan con cada vez más frecuencia en sus discursos, a la vez que todos se han manifestado entusiasmados con la llegada del "papa latinoamericano" al sillón del Vaticano.
La mayor concentración de católicos del mundo puede haber empujado a estos dirigentes a esa conversión, pero lo cierto es que su contracara ha sido una cantidad de deudas sociales pendientes, sobre todo en relación a los derechos de las mujeres.
Infobae habló con Rubén Dri, filósofo y teólogo profesor de la Universidad de Buenos Aires, quien explicó que Nicolás Maduro, a diferencia de su antecesor Hugo Chávez, posee una formación atea: "Maduro viene del ateísmo y de pronto se encuentra ocupando el liderazgo de Chávez, y con eso ante la necesidad de dar respuesta también en el plano religioso".
"Su discurso religioso es de alguien que no ha madurado esas concepciones e ideas. No expresan la maduración de una experiencia religiosa, y eso es una gran deficiencia", agregó.
Rafael Correa por su parte ha ocupado en las últimas semanas las tapas de los diarios de la región después de que asegurar que presentaría su renuncia en caso de que el congreso, en el marco del debate por el nuevo código penal, aprobara la despenalización del aborto.
"Creo que en el caso de Correa se trata de una posición personal, ya que él dice que se formó en la Teología de la Liberación. Los que sosteníamos esas ideas en la década del '60 y '70 no teníamos en cuenta cuestiones como la teoría de género, las poblaciones originarias, por ejemplo. Todavía no eran cuestiones tratadas como 'problemas sociales'. Por eso creo que la posición de Correa es una posición retrógrada", detalló Dri.
Fuentes de la organización ecuatoriana Salud Mujeres, que tienen la primera línea de Latinoamérica de información sobre aborto con medicamentos y distintos temas de educación sexual, hablaron con Infobae sobre las polémicas declaraciones del mandatario.
"Ecuador es un país que se dice progresista, pero en materia de los derechos de la mujer es absolutamente retrógrado"
"Ecuador es un país que se dice progresista, pero en materia de los derechos de la mujer es absolutamente retrógrado", afirmó.
"El presidente debería saber que nuestra Constitución es laica, él confunde sus posiciones individuales con los intereses de toda la nación", explicó la misma fuente, al tiempo que habló de la excelente relación que el presidente tiene con la iglesia católica.
La mezcla ideológica alcanza un punto tal que uno de los principales candidatos opositores en las últimas elecciones presidenciales y exponente de la derecha ecuatoriana, Guillermo Lasso, manifestó a Correa "todo su apoyo" en su posición sobre el aborto.
De acuerdo a información recabada por diferentes ONG y fundaciones de mujeres, en Ecuador se realizan alrededor de 95 abortos al año, dentro de los cuales sólo 200 son legales, al tiempo que se producen 330 muertes por cada cien mil abortos.
Bolivia no presenta un escenario mucho más alentador para las mujeres. Al igual que en Venezuela y Ecuador el aborto se encuentra penalizado, a excepción de los casos en los que corre riesgo la vida de la mujer, o en los que el embarazo es fruto de una violación.
Mónica Novillo es responsable de incidencia en Marco Normativo de la Coordinadora de la Mujer de Bolivia. Explicó a Infobae que a pesar de la vigencia de esta norma, ése artículo no se cumple debido a una serie de factores que tienen que ver con una autorización judicial que debe dar un juez para proceder con la interrupción del embarazo.
"Se han documentado muchos casos que evidencian la dilación intencionada de la autorización judicial por parte de jueces. También existen testimonios de mujeres que habiendo logrado la autorización judicial han tenido que enfrentar la negación de los médicos que argumentaron la cláusula de conciencia", detalló Novillo.
Según Natasha Loayza, de ONU Mujeres-Bolivia, el país gobernado por Evo Morales figura como el de los peores índices de violencia física y sexual de la región: "Desde el 2012 la problemática ha estado instalada en los medios y eso permitió que el 9 de marzo de este año se apruebe la Ley Integral para garantizar a las mujeres una vida libre de Violencia, que aún no ha sido implementada", afirmó Loayza.
Según la especialista esto no será nada sencillo, ya que el antecedente -una ley del año 1995 contra la violencia intrafamiliar-, dieciocho años más tarde sólo se ha aplicado en una proporción muy limitada. "Si la ley se logra aplicar en un 50% este país cambiaría muchísimo", dijo Loaiza, escéptica.
De acuerdo a un informe publicado este año por el Banco Mundial, Bolivia figura además como uno de los 15 países en los que las mujeres deben pedir permiso a los hombres para trabajar.
El propio Evo Morales ha despertado la polémica en sucesivas oportunidades con diferentes declaraciones sobre temas como la homosexualidad, o el lugar de la mujer en la sociedad.
En el año 2010, con motivo de una cumbre sobre cambio climático, Morales ofreció un discurso en el que atribuyó las "desviaciones" homosexuales de los hombres al consumo de pollo, debido a las hormonas femeninas de dicho alimento. También causó revuelo cuando dijo que para él la mujer es sustituta de la madre, ya que deben ser "cariñosas" y "preocuparse por la alimentación".
Evangelina Garcia-Prince, especialista en las cuestiones vinculadas al género, explicó a Infobae que en Venezuela los asuntos de igualdad de género no son parte de la agenda política del gobierno, y las iniciativas dirigidas a las mujeres no obedecen a una planificación predeterminada.
Fuentes de UNFPA Venezuela aseguraron que no hay datos de los abortos porque éstos no se registran como tales. Esto representa un primer problema a la hora de implementar políticas para combatir este flajelo.
Venezuela es un país laico, pero hay un altísimo porcentaje de colegios religiosos, que llegan casi la mitad de las escuelas medias totales. La misma fuente explicó que existen lineamientos para dictar educación sexual, aunque formalmente no se han aplicado, a pesar de que se trata de una demanda de los jóvenes.
En este contexto, no debería haber extrañado el encuentro del presidente Nicolás Maduro con el Papa Francisco, aunque Rubén Dri lo calificó de "manejo político": "Creo que tanto Evo como Correa efectivamente están entusiasmados con la llegada de Francisco al Vaticano. Lo de Maduro sin embargo me parece que se trata de un manejo político. Aunque todo está por verse".
El periodista de
acaba de definir ese vínculo complejo de forma sencilla:
, dijo. En el artículo titulado
el periodista destaca su personalidad austera y las reformas que impulsa en la Iglesia, y deja abierta la posibilidad de que estemos ante la era de la "izquierda clerical".