El Partido Comunista de China (PCCh) se comprometió este martes a darle un papel "determinante" a los mercados y a alentar el desarrollo del sector privado y el consumo interno para impulsar el crecimiento de la segunda mayor economía mundial.
Al concluir la reunión del XVIII Comité Central del PCCh, cita celebrada a puertas cerradas durante cuatro días con la asistencia de sus 205 miembros, el partido gobernante declaró con bastantes ambigüedades que realizará amplias reformas a su sistema económico para lograr "resultados decisivos" para el 2020.
De acuerdo al comunicado divulgado por la agencia oficial Xinhua, los nuevos líderes, encabezados por el presidente, Xi Jinping, y el primer ministro Li Keqiang, impulsan un modelo de crecimiento más basado en el consumo interno que reemplace al actual, apoyado en las exportaciones y unas empresas estatales gigantes y que comienza a dar señales de agotamiento.
Lo principal es el establecimiento de una relación adecuada entre el gobierno y los mercados, en la que éstos jueguen un papel "decisivo" en la asignación de recursos y no meramente "básico", como era la consigna del PCCh hasta ahora.
Para ello, el primer paso debe ser el establecimiento de un mercado abierto y unificado en el que exista una competencia "ordenada".
Aunque el sector público continuará como el dominante, se alentará el desarrollo del privado, que actualmente abarca el 60% de la economía, para estimular la vitalidad y la creatividad en el desarrollo del país.
"Tanto el sector público como el no público de la economía son importantes componentes de la economía socialista de mercado y bases significativas para el desarrollo económico y social", sostiene el texto también reproducido por las agencias EFE y DPA.
El sistema de protección de los derechos se mejorará y las empresas públicas tendrán que regirse por prácticas corporativas modernas, asegura el documento oficial.
Otra novedad será que los terrenos edificables en las ciudades y en el campo podrán ser ofrecidos para su venta en el mercado. Sin embargo, el documento no trae medidas concretas sobre una reforma agraria que permita a los campesinos vender sus tierras.
Hasta ahora los campesinos solamente pueden arrendarlas y reciben una indemnización muy baja cuando las autoridades locales cambian el uso de la tierra y la venden a empresas inmobiliarias.
El Partido prevé también el establecimiento de un sistema financiero moderno. China, declara, necesita mejorar sus sistemas fiscal y presupuestario para hacerlos más transparentes y conseguir que las responsabilidades de los departamentos gubernamentales coincidan con sus gastos.
En el plano político hay más definiciones que medidas concretas: promete reformas encaminadas a mejorar la credibilidad y el funcionamiento del gobierno y reducir la burocracia.
El sistema judicial se someterá a cambios para garantizar los derechos del pueblo y la independencia judicial. De acuerdo con el texto, entre los objetivos deben figurar el respeto a la Constitución, la reforma del sistema para hacer cumplir las leyes y la mejora de las prácticas judiciales y la protección de los derechos humanos.