Las
reservas internacionales del Banco Central descendieron este martes a u$s33.121 millones, y registraron una caída de 200 millones con relación a la jornada
anterior. Así, los fondos atesorados por el Central quedaron cerca de
perforar otro piso, el de los 33.000 millones de dólares.
Para enfriar la
plaza cambiaria, el Central vendió durante la jornada unos 80 millones de
dólares.
En lo que va del año, y a pesar del cepo cambiario, la autoridad
monetaria sufrió una caída de u$s10.169 millones, como consecuencia del
pago de deuda con reservas, de la intervención en el mercado y la salida de
depósitos.
Según datos oficiales, en 2011 se perdieron u$s5.814 millones y en 2012, unos u$s3.084 millones, que sumados hacen un total de u$s8.898 millones
de la moneda norteamericana, mil millones menos de la caída de reservas de este
año.
En comparación con el volumen récord de reservas alcanzado el 26 de enero
de 2011 de u$s52.654 millones, se perdieron u$s19.533 millones, según los últimos datos preliminares.
Ante la
sostenida pérdida de reservas, el Central obligará a las exportadoras de granos
a tomar créditos en el exterior en lugar de hacerlo a través de entidades
locales, para que ingresen más dólares al país.
La autoridad monetaria
intenta así redireccionar los créditos, con el fin de que grandes compañías
dejen de financiarse en pesos en el medio local y puedan hacerlo las empresas
que no tienen la posibilidad de salir al exterior a buscar fondos.
Según
trascendió, se establecerá un tope en la capacidad prestable de los bancos
respecto de las empresas con 75% de su producción exportable y un
stock de deuda superior a los 200 millones de pesos. El Central lanzará una
normativa para limitar el financiamiento local en pesos a las grandes
cerealeras.