"Lamentamos el contenido del fallo, porque se aparta de una tradición que había generado la Corte y de algunos estándares internacionales en cuanto a la libertad de expresión", evaluó Etchevers, aunque no abundó en la respuesta. "La ley es mala, anacrónica, regula violando los últimos precedentes de la Corte Interamericana, se aleja de los antecedentes de la ley norteamericana y busca medios dependientes del poder político y fragmentados. Es una norma creada con nombre y apellido, para destruir un grupo", insistió.
Ayer, el titular de la Afsca, Martín Sabatella, informó que continuará el proceso de adecuación de oficio del Grupo Clarín a la ley, que fue notificado el pasado 17 de diciembre, pero que estaba suspendido por una medida cautelar que cayó con el fallo de ayer. "Seguirá su proceso natural", dijo el funcionario.
Pero el gerente de Comunicaciones del Grupo Clarín rechazó esa posibilidad. "De ninguna manera se nos puede aplicar la adecuación de oficio, como ayer reiteró el señor Sabbatella, sabiendo que estaba cometiendo un acto nulo. No se le puede aplicar a un grupo que tuvo la ley suspendida. El plazo fue prorrogado por el Gobierno por un año, del que han gozado todos los grupos, menos Clarín", sostuvo. Y evitó decir de qué medios se podrían desprender ni aclaró si el Grupo tiene intenciones de presentar un plan voluntario.
Además, adelantó que volverá a judicializar el caso si el Gobierno procede de hecho: "Frente a una acción de hecho con nuestras licencias, no tendremos más opción que acudir a los tribunales y creo que es lo que la Corte deja claro en el fallo".
Sabatella volvió a estar en el centro de la polémica cuando el vocero del Grupo Clarín disparó: "La Corte ha dicho que la autoridad de aplicación debe ser transparente, equilibrada, imparcial, y ninguna de estas condiciones están dadas, todo lo contrario".
A la hora de comparar la ley con otras, comentó: "Hay una matriz en los gobiernos bolivarianos donde el gobierno quiere tener una matriz muy fuerte en lo comunicacional". "El no respeto a la licencia vigente ni siquiera lo plantearon en Venezuela y Ecuador, por lo que nuestras leyes son aún más restrictivas", analizó Etchevers, con respecto a la obligación de vender las licencias excedentes que plantea la ley. "En Venezuela esperaron que las licencias se vencieran para quitárselas, por ejemplo, a RCTV", ejemplificó.
También se quejó de la disparidad de Cablevisión frente a Direct TV. "La ley vulnera el principio de igualdad cuando le permite a nuestro principal competidor llegar con una sola licencia a 2.200 localidades del país, mientras que nuestro cableoperador puede cubrir apenas el 1%", opinó. "Lo mismo pasa con los grupos extranjeros, que pueden explotar en Argentina todos los canales de cable que quieran, mientras que los nacionales sólo pueden tener una. Es un doble discurso", añadió.
Sobre el futuro, dijo. "Estamos trabajando para defender no sólo nuestro derecho a seguir ejerciendo el periodismo y entreteniendo, sino para que nos puedan seguir eligiendo. En ninguno de los medios en los que operamos somos monopólicos, siempre hay opciones frente a las que ofrecemos, y fuimos elegidos en un mercado de abierta competencia".