Domnica Cemortan, una joven bailarina moldava, confirmó que fue amante de Francesco Schettino, comandante del Costa Concordia cuyo naufragio dejó 32 muertos, y ella se encontraba en el puente de mando en el momento del accidente.
"Sí, mantuve una relación con Francesco Schettino pero no lo he vuelto a ver desde el naufragio", declaró la joven, citada por los medios, ante el tribunal de Grosseto, donde se celebra el proceso del ex comandante del buque.
La joven rubia reconoció que fue invitada al barco. "Cuando eres la amante de alguien, no te piden billete", dijo. Su testimonio deja mal parado a Francesco Schettino, hombre casado, que comparece por este naufragio cerca de la isla toscana de Giglio que causó 32 muertos en enero de 2012.
Domnica Cemortan indicó que cenaba con el comandante y al llegar a los postres, subieron tres al puente de mando para seguir el acercamiento a la isla de Giglio.
"Todo parecía normal, no vi nada porque estaba muy oscuro. En un momento dado, un oficial se equivocó en la ejecución de su orden. Él (Schettino) le criticó y repitió la orden. Luego de unos minutos, sucedió lo que sucedió. No noté el impacto y sí que vi que se encendían las luces de emergencia", dijo, según el diario La Repubblica.
La noche del 13 de enero de 2012, el Costa Concordia, un crucero de gran porte que navegaba demasiado cerca de la costa, chocó con un escolló y encalló en unas rocas a unas decenas de metros de Giglio con 4.229 personas a bordo, entre ellos 3.200 turistas.
Francesco Schettino, considerado "el hombre más odiado de Italia" después del naufragio, está perseguido por homicidios múltiples por imprudencia, abandono de barco y daños al medio ambiente. Su juicio empezó a mediados de julio y debe durar unos meses con declaraciones de cientos de testigos.